Guadalajara, una ciudad inhabitable

Zona Cero

Por Jonathan Ávila / @JonathanAvilaG

La desaparición no es un estado del ser que se extienda perpetuamente, si lo vemos desde la perspectiva de quien se vuelve víctima directa. La desaparición es una técnica que se ha expandido hasta su aplicación sistemática, organizada y generalizada; primero por el Estado, desde el periodo más autoritario en México, y ahora desde agentes privados, desbordando por completo una técnica que se fue sofisticando con el paso del tiempo y de acuerdo al contexto.

Entender la desaparición como una técnica que forma parte de un proceso más amplio nos ayuda a visualizar su apertura más compleja dentro de un entramado de muchas violencias. Dice el historiador Camilo Vicente Ovalle, que la idea de la desaparición se ha remitido únicamente a aquel estatus entendido como permanente, pero sin tomar en cuenta aquellos casos en donde se da también la desaparición transitoria, ya que la desaparición en sí misma no forma parte de un procedimiento que esté determinado en su finalidad rumbo a la eliminación del sujeto que lo padecer.

Por esa razón, lo ocurrido en Chapalita abre muchas dudas que solo pueden ser articuladas o vistas en perspectiva crítica con respecto al trabajo presentado hace apenas unos meses por ZonaDocs, donde pudimos dimensionar el complejo entramado del exterminio en Guadalajara. Esta ciudad que se convirtió en una zona de exterminio y desaparición confronta de lleno cualquier propuesta o salida fácil que pretendan quienes ahora suben fotografías a sus redes como candidatos a la alcaldía de los municipios que conforman la Zona Metropolitana de Guadalajara. Tan solo en 2019, de acuerdo al recuento publicado en este medio, se supo de decenas de casas y fosas que evidenciaban un complejo entramado de privación, cautiverio, tortura y/o asesinato.

Permanentemente, la Fiscalía de Jalisco y otras entidades como la Coordinación Estratégica de Seguridad o el propio Ayuntamiento de Guadalajara, trataron de criminalizar a las víctimas cautivas señalando que todas, o si no todas una mayoría, contaban con antecedentes criminales.

Por cierto que fuese esto, lo cual resulta irrelevante ante una ciudad sitiada por las redes macrocriminales que involucran al Estado/crimen organizado/privados, no hay duda que la ciudad se ha convertido en un espacio inhabitable. Esto es tremendo. Vivimos en una ciudad INHABITABLE, donde siempre estamos en la zona equivocada a la hora equivocada.

Ser víctimas de ese circuito de desaparición en donde no hay certeza del destino final que podamos tener deja con un sentimiento incontenible de ansiedad. Necesitamos buscar rutas para el diálogo y la construcción de comunidad que hagan frente a este circuito de desaparición y exterminio. Se requiere de una articulación paralela de las respuestas político-partidistas, porque no hay opciones viables desde los partidos. Limitados bajo la perspectiva del Estado, los partidos solo otorgan respuestas que nos regresan al marco de la represión y que ponen en duda cualquier propuesta. 

Vivimos en una ciudad que ya no se contiene ante la violencia, pero también vivimos en una sociedad paralizada, atemorizada, atomizada por el terror de los perpetradores...¿quién defiende a “Jalisco” de quienes dicen defender, pero hacen lo contrario? Somos una sociedad que ha dejado a las familias de personas desaparecidas y víctimas de la violencia en México solas. Lo increíble es cómo esas mismas familias hoy tampoco tienen miedo ante la grave violación que viven, pues salen a las calles y paralizan los espacio para gritar por los suyos, así como es de sorprenderse la existencia de tres casas cercanas en donde se tenían cautivas a decenas de personas, lo es la fuerte movilización de las famiias que nos confrontan con nuestra zona de confort, ¿cómo responder a su llamada?, ¿cómo articular un circuito ciudadano, que formule procedimientos y técnicas alternativas para enfrentar esta barbarie?

 

Comparte

Jonathan Avila
Jonathan Avila
Autor de Zona Cero. Periodista, miembro de CONNECTAS Hub, aspirante a sociólogo e investigador de desaparición de personas en el estado de Jalisco.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Quizás también te interese leer