Colectivas feministas y mujeres organizadas a través de la red YoVoy8deMarzo en Jalisco, junto con familiares y sobrevivientes de la violencia feminicida en el estado, instalaron una antimonumenta con la leyenda “Ni perdón ni olvido, memoria, verdad y justicia. No más feminicidios”.
En el andador Alcalde frente a Palacio de Gobierno y Plaza de Armas en el Centro Histórico de Guadalajara, la estructura de 3.80 metros con la forma del puño feminista en alto, es la materialización de la demanda inclaudicable de ¡Justicia! y el “recuerdo constante de las deudas pendientes que tiene el Estado para con las mujeres”, señalaron las feministas.
Las labores de instalación se llevaron a cabo en el marco de la jornada por el #25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. A la par del proceso de instalación que demoró cerca de seis horas, se estuvieron desarrollando talleres, intervenciones artísticas, charlas de sensibilización y visibilización de la violencia feminicida.
Por Dalia Souza / @DaliaSouza y Darwin Franco / @DarwinFranco
Fotos: Mario Marlo / @MarioMarlo
Pocos minutos después del medio día, este miércoles 25 de noviembre, las mujeres feministas del estado, organizadas a través de la Red YoVoy8deMarzo, familiares de víctimas de feminicidio y sobrevivientes, así como, personas aliadas y defensoras de derechos humanos volvieron a hacer historia. Esta vez con la instalación de la primera antimonumenta en el estado.
Se trata de una estructura de apariencia metálica de color rosado y morado, con la forma del puño feminista en alto, acompañada de la frase: “Ni perdón ni olvido, memoria, verdad y justicia. No más feminicidios”. Una pieza semejante se encuentra instalada también frente a Bellas Artes en la Ciudad de México y ha servido para visibilizar el estado actual de violencia machista y feminicida que enfrentan las mujeres en el país, frente a gobiernos indolentes, incapaces y cómplices de la impunidad machista.
El proceso de instalación demoró cerca de seis horas para que la pieza quedara fija e inamovible, y es que, no se hicieron esperar los comentarios de ciudadanos poco sensibles que reclamaron el espacio público como propio, así como, a funcionarios de alto rango, como el Secretario General de Gobierno, Enrique Ibarra quien acudió a reconocer la acción feminista a la vez que les solicitaba “instalarla en otra parte”.
“Cuando te buscamos no nos atiendes y ahora llegaste corriendo” y “las familias no te pidieron permiso” fueron algunas de las respuestas que Ibarra recibió por parte de las feministas. Después, sólo le quedó irse del lugar.
“Los monumentos sirven para tener el recuerdo de hechos memorables, los antimonumentos, las antimonumentas como ésta, sirven para que no olvidemos las injusticias, los crímenes y las tragedias humanas” afirmó la abogada feminista del Comité de América Latina y El Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (CLADEM) en México, Guadalupe Ramos Ponce.
Y es que, denunciando que en Jalisco han sido asesinadas 230 mujeres, jóvenes y niñas (de enero al 25 de noviembre, de acuerdo con los registros de las colectivas y organizaciones), advirtió que esta antimonumenta, es un reclamo para el Gobierno del estado y para la sociedad, como si se tratase de “un recuerdo constante de las deudas pendientes” que ambos tienen para con las mujeres.
“El feminicidio es un instrumento represivo que afecta a las mujeres y a toda la sociedad” explicó, por lo tanto, “agredir a las mujeres por ser mujeres” es lo mismo que “paralizar el funcionamiento del país” pues fragmenta de raíz el tejido social, instala el miedo en las relaciones humanas cotidianas y nutre la desconfianza hacia el estado.
Por ello, “con la instalación de la antimonumenta en Jalisco otra vez decimos ¡Basta! Exigimos el fin de la violencia feminicida” manifestó la defensora como parte del reclamo colectivo.
Al respecto, familiares de víctimas de feminicidio que aún no reciben justicia pues los feminicidas de sus hijas, hermanas y madres permanecen prófugos, sin una sanción, advirtieron que esta antimonumenta es un ejercicio de memoria para que no se olvide a todas aquellas mujeres que hoy se encuentran desaparecidas, que han sido asesinadas, o que han sufrido cualquier tipo de violencia por ser mujeres.
Particularmente, para que “salgan los señores (funcionarios públicos) y sea lo primero que vean, que vean que no olvidamos y que no las olviden, porque no estamos solas, estamos todas juntas por ellas para alzar la voz” señaló una de las familias.
A la instalación de la antimonumenta le siguió el nombramiento de la Plaza Imelda Virgen, un espacio que ahora concentrará simbólica y materialmente la exigencia de justicia para todas las víctimas de feminicidio en Jalisco.