En el informe de 2019 de Episodios de Desplazamientos Internos Forzados Masivos en México de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), hace un recuento del panorama, los contextos, las causas, las formas de violencia, el perfil de las personas desplazadas, los tipos de localidad en los que ocurrieron los episodios y una comparación con los últimos cuatro años.
De acuerdo con el registro acumulativo de la CMDPDH, el número de personas desplazadas por la fuerza en México hasta diciembre de 2019 asciende a 346 mil 945 víctimas.
De enero a diciembre de 2019, se registraron 28 episodios de desplazamiento interno forzado masivo en ocho estados, 27 municipios y 61 localidades. Los estados en donde se registraron más episodios fueron Chipas (con nueve episodios) y Guerrero (con ocho episodios), lo que quiere decir que al menos 8 mil 664 personas tuvieron que dejar su residencia habitual, en los que el contexto estuvo marcado por diversos tipos de violencia política, conflictos sociales y violación a derechos humanos.
Por Samantha Anaya/@ Sam_An16
Ilustración de portada, mapas y gráficas: Episodios de Desplazamientos Internos Forzados Masivos en México, Informe 2019 de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH)
Los estados de Guerrero y Oaxaca concentran más del 70% de las personas desplazadas en 2019. Por un lado, Guerrero ocupó por segundo año consecutivo el primer lugar con 5 mil 128 personas desplazadas, lo que representa el 59.19% del total de los casos acumulados. Mientras que, Oaxaca se posicionó como la segunda entidad con mayor número de personas desplazadas internamente con mil 071 víctimas, lo cual equivale a 12.36%.
En cuanto a la tendencia que se ha mostrado en los últimos años en relación con el número de personas desplazadas anualmente en México, se puede notar una disminución desde 2016, año en que se estimó un total de 23 mil 169 personas, cifra que sumó 8 mil 664 víctimas de desplazamiento para 2019.
Sin embargo, esta disminución no representa un mejor panorama, ya que, aun cuando se están desplazando masivamente menos personas cada año, cada vez son más los eventos de violencia que obligan a personas a abandonar sus hogares. Además, de 2018 a 2019 la cantidad de entidades federales afectadas aumento de cinco a ocho.
De 2016 a 2018, Guerrero fue el estado con mayor número de episodios de desplazamiento masivo, y para 2019 ocupó el segundo lugar, con tan sólo un episodio menos que Chipas, el cual ocupó el primer lugar.
Los principales estados expulsores de personas desplazadas internamente de 2016 a 2019 son: Chipas, que pasó de mil 117 a 668; Guerrero, que en este periodo de tiempo mostró un aumento alarmante, pasando de mil 650 a 5,128; Michoacán, el cual mostró una disminución, al pasar de 10 mil a 704; Oaxaca que mostró un repunte, de 850 a mil 071; y Sinaloa, que pasó de 4 mil 208 a 393.
Las causas detrás del desplazamiento interno forzado
Entre las causas que propiciaron los episodios en 2019 se encuentran: violencia generada por grupos armados organizados; violencia política, conflictividad social, conflictos territoriales; y violaciones a derechos humanos.
En cuanto a la violencia generada por grupos armados organizados, ésta fue la causa de 16 de los 28 episodios (57.14% del total). Los eventos ocurrieron en Chiapas, Durango, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas. Por causa de este tipo de violencia, el año pasado 2019, 6 mil 925 personas (80%) se vieron obligadas a abandonar sus hogares.
Por su parte, 11 de los 28 episodios fueron causados por violencia política, conflictos sociales y conflictos territoriales (39.29% del total). Esto ocurrió en los estados de Chiapas y Oaxaca y al menos nueve de ellos afectaron a población perteneciente a alguna comunidad indígena. De las 8 mil 664 personas desplazadas internamente en 2019, mil 658 (19.14%) se desplazaron a causa de este tipo de violencia.
Mientras que, la violencia de derechos humanos es culpable de 1 de los 28 episodios registrados en 2019 (3.57%del total). Este episodio se presentó en Chiapas y desplazó a 81 personas, lo que representa alrededor del 0.9% de las 8 mil 664 personas desplazadas internamente durante ese año.
En los últimos tres años la violencia generada por grupos armados organizados ha generado un total de 24 mil 313 nuevos desplazamientos; por otro lado, la violencia política, la conflictividad social y los conflictos territoriales es responsable de 15 mil 921 nuevos desplazamientos en el mismo periodo.
¿Cómo se expresó la violencia que obligó a las personas a desplazarse?
Entre las formas en las que se mostró la violencia que determinó la vida de miles de personas están: incursiones de grupos armados y ataque violentos (con o sin el uso de armas de fuego), a una o más comunidades o grupos específicos de personas, sus viviendas y/o propiedades; enfrentamientos armados que involucran a diversos grupos, agentes del Estado, grupos de autodefensa, pobladores de las comunidades desplazadas, grupos de corte paramilitar y civiles armados no identificados; privación ilegal de la libertad y delitos contra la vida e integridad física, entre los que se encuentran desapariciones, secuestros y asesinatos; temor generado por la presencia de organizaciones criminales; y expulsiones y/o amenazas, violencia que es aplicada por parte del Estado, y que se caracteriza por el uso indebido de la fuerza, la violación a derechos humanos, el incumplimiento de los criterios y procesos establecidos por los estándares nacionales e internacionales en materia de desalojo forzado.
De los 28 episodios de desplazamiento interno forzado, siete (25%) fueron provocados por incursiones y ataques violentos. El contexto en el que se presentaron estos episodios estuvo acompañado de violencia política, conflictos sociales y territoriales. De estos siete episodios, seis ocurrieron en Chipas y uno en Oaxaca.
Tres episodios (10.71%) fueron detonados por enfrentamientos de grupos delictivos, en Chihuahua, Durango y Guerrero.
Las incursiones de grupos armados y ataques violentos son responsables de generar ocho episodios más (32.14%) de desplazamientos forzados masivos; uno se presentó en Oaxaca, inmerso en un contexto de conflictividad social y disputas territoriales; otros siete en Guerrero y Michoacán debido a la actividad de grupos delictivos.
De los 28 episodios de desplazamiento interno forzado, 4 de ellos (14.29%) fueron generados por el temor fundado ante la violencia de organizaciones criminales, en los estados de Guerrero, Michoacán y Sinaloa.
Otros 3 episodios (10.71%) se presentaron en Chipas y Oaxaca, debido a expulsiones y/o amenazas en contextos de violencia política, conflictividad social y territoriales.
La violencia ejercida por la privación ilegal de la libertad y/o delitos contra la vida e integridad física de personas de la comunidad o cercanas a ésta, fue causante de dos desplazamientos masivos (3.5%). Uno de estos ocurrió en Tamaulipas, ya que la población se vio obligada a desplazarse tras el asesinato de tres miembros de una familia, en un contexto caracterizado por la presencia de grupos delictivos y una disputa territorial entre cárteles. Otro más tuvo lugar en Michoacán, en medio de enfrentamientos armados.
Un episodio más en Chiapas fue detonado por violación a los derechos humanos e incumplimiento de estándares nacionales e internacionales en la materia.
El contexto antes, durante y después de los episodios de desplazamiento interno forzado
En 19 episodios (67.86% del total) se reportó el uso de armas de fuego o la presencia de personas armadas; en 18 episodios (64.29% del total) se reportó que la población sufrió amenazas e intimidación; en 16 episodios (57.14% del total) se reportó que casas, cultivos y/o negocios fueron quemados, destruidos o baleados; en 13 episodios (46.43% del total) se reportó el saqueo de viviendas y el robo de animales, cultivos u otras pertenencias; en 13 episodios (46.43% del total) se reportó la intencionalidad de desplazar a la población; en nueve episodios (32.14% del total) se reportó la práctica de extorsiones o cobros de cuotas de piso; en cuatro episodios (14.29% del total) se reportó la ocurrencia de desapariciones de personas de la comunidad o cercanas a éstas; en tres episodios (10.71% del total) se reportó que los desplazamientos se generaron debido a represalias en contra la población; en tres episodios (10.71% del total) se reportaron asesinatos de personas de la comunidad o cercanas a éstas; en dos episodios (7.14% del total) se reportó la práctica de reclutamiento forzado o el temor fundado de la población ante esta posibilidad, ambos en el estado de Guerrero; en dos episodios (7.14% del total) se reportó la detención de personas de las comunidades desplazadas, en los estados de Chiapas y Oaxaca.
Los dos actos más violentos (el uso de armas de fuego o la presencia de personas armadas y la práctica de amenazas e intimidación), tuvieron lugar en los 8 estados donde se tiene registro de un mayor número de episodios de desplazamiento masivo en 2019 (Chiapas, Chihuahua, Durango, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Sinaloa y Tamaulipas), y en todos los contextos de violencia (violencia generada por grupos armados organizados; violencia política, conflictividad social y conflictos territoriales; y violaciones de derechos humanos).
El perfil de las personas desplazadas
Entre las víctimas de estos tipos de violencia que les obligan a abandonar sus hogares se encuentran familias completas, lo que deja ver que el perfil de personas que viven esta situación es variado, ya que entre la población que se ve obligada a trasladarse se encuentran mujeres, hombres, niñas, niños y adolescentes, jóvenes y personas adultas mayores.
En el informe, se menciona que se ha observado que algunos perfiles son más frecuentes, debido a las condiciones específicas de vulnerabilidad a las que están expuestos durante el ciclo de desplazamiento. En 18 episodios (64.29% del total) se encontraban niñas y niños; en 12 episodios (42.86% del total) se ubicó la presencia de mujeres; en 10 episodios (35.71% del total) se encontraban hombres; en seis episodios (21.43% del total) se ubicó la presencia de personas adultas mayores; en otros dos episodios (7.14% del total) estuvieron presentes jóvenes; y en dos episodios más (7.14% del total) se mencionó específicamente la presencia de mujeres embarazadas.
El contexto de intimidación y violencia que obliga a la población de comunidades indígenas a desplazarse
De los 28 episodios de desplazamiento interno forzado masivo causado por violencia registrados en 2019, 12 (alrededor de 43% del total) desplazaron a población indígena. De estos, nueve ocurrieron Chiapas, el cual cuenta con el mayor número de episodios de desplazamiento masivo en ese año y donde todos los episodios identificados afectaron a población indígena. El resto de estos episodios ocurrieron en Chihuahua, Guerrero y Oaxaca.
El contexto que enmarcó estos desplazamientos que afectaron a parte de la población de comunidades indígenas, estuvo caracterizado por violencia política, conflictos sociales y territoriales. Nueve de ellos en los estados de Chiapas y Oaxaca; dos en Chihuahua y Guerrero, en medio de violencia generada por grupos armados organizados; y un episodio más se presentó entre violaciones a derechos humanos, en Chiapas.
Aun cuando la cifra de personas pertenecientes alguna comunidad indígena disminuyó en 2019 (pasó de 12 mil 323, en 2017 a mil 300, para 2019), la vulnerabilidad en la que viven ante el desplazamiento interno forzado deja ver un aumento en la persistencia de violencia y conflictos en comunidades indígenas del país. Por otro lado, es necesario considerar que actualmente un gran número de personas pertenecientes a comunidades indígenas ya se encuentran desplazadas internamente.
En 2019 en el estado de Chiapas, al menos cinco comunidades indígenas fueron afectadas por desplazamientos masivos: los nahuas, los tzotziles, los zapotecas, los mayas chol y los tzeltales.
En cuanto al tipo de localidades en las que se presentaron los desplazamientos internos forzados, el 78% de los episodios ocurrieron en localidades rurales; un 11% tuvo lugar en localidades urbanas; y otro 11% no se pudo identificar si el episodio ocurrió en localidades rurales o urbanas.
El destino de la población desplazada internamente
En ocho episodios se reportó que las personas desplazadas permanecieron en el municipio donde ocurrió el desplazamiento, de forma que se trató de un movimiento intramunicipal; en cinco episodios se identificó que las personas desplazadas se trasladaron a diferentes municipios en la misma entidad federativa donde ocurrió el desplazamiento; en cuatro episodios se tiene registro de que algunas personas desplazadas permanecieron en el mismo municipio, mientras que otras se fueron a otros municipios en la misma entidad federativa donde ocurrió el desplazamiento.
En un episodio se reportaron movimientos intramunicipales, intraestatales e interestatales, es decir, una parte de la población desplazada permaneció en el mismo municipio, otra parte se fue a otros municipios en la misma entidad federativa donde ocurrió el desplazamiento y otra parte se trasladó a otros estados; y en ocho episodios no se pudo identificar el destino de la población desplazada internamente.
Mientras que la cifra de personas desplazadas anualmente ha disminuido, los tipos de violencia y los contextos en los que se presentan se han replicado. De acuerdo con la CMDPDH, éste es un problema que tiene de fondo la violación a los derechos humanos fundamentales de la población, principalmente, el derecho a tener una vida libre de violencia.