Por Marcela Gomez
“La lógica de las intervenciones es hacer responsables a los varones de la violencia que ejercen contra las mujeres”, así describe el taller de Masculinidades Positivas María Elena García, presidenta del Instituto Jalisciense de las Mujeres. El curso, que comienza el jueves 17 de enero, tiene ya dos grupos con cupo de 20 varones, uno semanal y otro sabatino. Comprende 5 sesiones, Lunes y Jueves de 18:00-20:00 o sábados de 9:00-13:00.
El patriarcado es un modelo de vida que todavía resulta un concepto difícil de entender entre los hombres, incluso entre las mujeres. De la misma manera es todo un reto procesar la idea de nuevas masculinidades, pues en principio debieran ser los propios hombres quienes identifiquen qué aprendizajes milenarios de su género son tóxicos y han dejado de agradarles, o les parecen simplemente absurdos. El indefinido Instituto Jalisciense de las Mujeres se propuso impartir para los varones que sientan inquietud sobre sus modos de ser hombre, el curso Masculinidades Positivas, pero y eso ¿Con qué se come?
Mirar a una mujer invariablemente y que su vestimenta sea tema de conversación con otros hombres,acosar con comentarios en la calle a las mujeres que les llaman la atención, gritar exorbitantemente en un gimnasio, o creer que pagar la cuenta significa tener el control de un encuentro o cita y un pagaré por relaciones sexuales, son ejemplos de convivencia entre hombres y mujeres que llevan su rol en la sociedad, su masculinidad a un nivel violento. Por décadas, se ha sembrado en niños, adolescentes y desde luego adultos y resultó no fue la mejor. Con la visibilización de las violencias hacia la mujer, también ha emergido el tipo de educación y cultura que busca que los varones se hagan responsables de actitudes y prácticas que vulneran los derechos de las mujeres.
En el Instituto Jalisciense de las Mujeres, como parte de las actividades de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (CONAVIM) a través del Centros Especializados para la Erradicación de las Conductas Violentas (CECOVIM) se abrió la convocatoria para un curso abierto sobre Masculinidades Positivas, un evento que, pese a que se difundió únicamente en redes sociales y en pocos días, se llenó el cupo, cuenta María Elena García, responsable de la dependencia.
“La lógica de las intervenciones es hacer responsables a los varones de la violencia que ejercen contra las mujeres”, así describe el curso María Elena García, presidenta del organismo cuya permanencia en la actual administración está en duda. El curso ya comenzó y tiene sesiones entre semana y sabatinas.
Originalmente estaba dirigido hacia hombres con un proceso judicial, como parte de las actividades obligatorias de la sanción por haber sido agresores de mujeres. El taller es impartido por varones certificados por Gendes, una organización cuya visión es que los hombres participan activamente en la construcción de la igualdad de género y la no violencia.
Malena explica la decisión de abrir el taller y hacerlo voluntario, pues precisa que no sólo los hombres reconocidos por el sistema penal como victimarios son agresores, sino que existen actitudes y conductas con las que a diario los varones ejercen violencia contra las mujeres. Se pronunció enérgica al respecto.
“Considero que siendo hombre eres cómplice de la violencia o aliado contra la violencia”
Existen distintos tipos de violencia contra las mujeres, y Malena aclara que, aunque muchas veces no lo reconozcan, también son agresores los hombres que comparten fotografías sexuales sin consentimiento en las redes sociales, o envían fotos no solicitadas de sus partes genitales; otra forma de violencia hacia la mujer que se pretende analizar y trasformar en el curso es reírse de los chistes de sus compañeros que hacen referencia a prácticas patriarcales.
De acuerdo con la Encuesta Nacional para la dinámica de las relaciones en los hogares (ENDIREH 2016), en Jalisco el 74.1% de las mujeres de 15 o más años, han sufrido algún tipo de violencia. Más de la mitad de la población femenina en Jalisco ha sido agredida ya sea por su pareja u otros agresores.
ENVIPEH, 2016, INEGI.
El curso es financiado con dinero de la Alerta de Violencia Contra las Mujeres de Jalisco, que recibió un presupuesto de 25 millones de pesos, de fondos federales, estatales y organismos públicos descentralizados. La alerta se emitió en noviembre de 2018, pese a que se solicitó en 2016 por parte de organizaciones de la sociedad civil, que denunciaron que de 2009 a 2016 los asesinatos de mujeres se habían triplicado en la entidad y la mayoría de los feminicidios permanecía impune.
En Jalisco se documentó que, de 269 asesinatos de mujeres ocurridos entre 2012 y 2013, solo 21 casos se estaban investigando como feminicidio; es decir, solo el 7%. Además, hasta 2014 existía una sola sentencia dictada por feminicidio en el estado.
En Jalisco se vive un contexto de violencia generalizada, no obstante las mujeres tienen una forma específica de padecer la violencia por motivos de género. El curso de masculinidades positivas busca que los varones identifiquen prácticas y actitudes violentas para que las eliminen de sus vidas.
“La apuesta es por interpelar a los hombres para que reconozcan y cambien esas actitudes y prácticas. Que ellos mismos se cuestionen y señalen sus privilegios. Y en función de esto abonen a la erradicación de la violencia contra las mujeres” describe Malena