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*La víctima exige una reparación integral del daño, puesto que el dictamen del juez la dejó sin garantías para mejorar su vida.
*El dictamen médico le pide al menos cuatro cirugías reconstructivas a Dulce Esmeralda.
*“De acuerdo con testimoniales, la víctima fue empujada al suelo por Jatziri Miriam “N”, quien junto con Carlos Mario “N”, le rocío alcohol en el cuerpo, mientras que él le prendió fuego con un cerillo. Posteriormente, la otra víctima ingresó al cuarto y al ver a su compañera en el suelo, procedió a auxiliarla, rociándole a ella el mismo líquido, por lo que también empezó a quemarse”, explicó Llaven Abarca, exfiscal general del estado.
Por Andrés Domínguez
Dulce Esmeralda, policía municipal de Tuxtla Gutiérrez, durante sus labores de protección y asistencia a la ciudadanía fue agredida por dos de sus compañeros de la institución. Le rosearon alcohol y prendieron fuego. Hoy sus agresores se encuentran libres, tras pagar apenas una pena de siete meses de prisión y una multa de tres mil pesos.
Condenas
Cabe señalar, por este caso se pronunciaron diversas instancias. Por ejemplo, la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados y Diputadas condenó el crimen de odio hacia Dulce “N”. María Wendy Briceño Zuloaga, Presidenta de la Comisión, mencionó que un crimen de odio como este, en contra de una mujer lesbiana que por el simple hecho de asumir su orientación sexual y que fue agredida de una forma brutal, no puede quedar en la impunidad.
El Observatorio Ciudadano de Derechos de la Población LGBT+ de Chiapas exigió, hace dos años, una sanción ejemplar y una investigación exhaustiva por violencia de género relacionada con la orientación sexual de una mujer policía adscrita a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez.
Al mismo tiempo, decenas de activistas y organizaciones solicitaron a las autoridades municipales tomar como prioridad este caso e investigar a fondo con el fin de imponer una sanción ejemplar para evitar una repetición de estos hechos.
Estatus legal
El 25 de marzo del 2020, terminando su jornada de trabajo, Dulce fue agredida por dos compañeros; un hombre y una mujer de la corporación de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, quienes le rosearon alcohol y prendieron fuego, provocándole quemaduras graves en tercer grado.
La Sentencia del Procedimiento Abreviado de la causa penal 140/2020, de fecha 16 de octubre del 2020, realizado en el Centro de Readaptación Social del Centro de Reinserción para Sentenciados No. 14 “El Amate” se observaron los siguientes hechos:
En primera, quedaron a salvo los derechos de la reparación del daño para la Dulce (víctima de delito de tentativa de homicidio). En segunda, dentro del proceso, los inculpados ofrecen a la víctima, como parte de la reparación del daño, la realización de una cirugía reconstructiva, a cargo del Dr. Mario Cesar Paredes Zenteno.
Además, la sentencia dictada por el juez de la causa condenó a prisión preventiva a la y el culpado a cuatro años de prisión. Sin embargo, a petición del abogado particular de los mismos, el juez de la ejecución concedió libertad bajo caución a los inculpados, el cual fue garantizado con el pago de la fianza por la cantidad de $3,000.00 (Tres Mil pesos 00/100 MN) a cada uno de ellos.
La defensa otorgada por la secretaria de Igualdad de Género pidió a Dulce Esmeralda Guillén Hernández, presentara un peritaje privado que cuantificara y demostrara medicamente el costo y las descripciones de los procedimientos quirúrgicos para su reparación del daño. Por este motivo, en marzo de 2023 se asistió a una consulta médica privada con el Dr. Mario Cesar Paredes Zenteno (Médico que ofrece la defensa dentro del juicio), quien cotizó la cantidad de $30,000 (treinta mil pesos 00/100 MN), por la expedición del dictamen médico, que acredite la o las cirugías reconstructivas necesarias.
Dicha cantidad, le costó diversos esfuerzos a la víctima poder cubrir; con el apoyo de la ciudadanía, pero en especial de la regidora Adriana Guillén.
Por tanto, la defensa de Dulce solicitó se realice un escrito mediante el cual, se pida al juez de la causa penal 140/2020, lo siguiente: la reparación del daño para la victima; la aceptación de la propuesta ofrecida por los inculpados de la cirugía reconstructiva y pagar el dictamen Médico al Dr. Mario Cesar Paredes Zenteno, médico propuesto por la contraparte para subsanar la relación del daño.
Lo anterior, con la finalidad de garantizar la reparación integral del daño.
Por ser de carácter necesario y urgente, en virtud de las secuelas de salud, físicas y morales que se están presentando en su persona, enfatiza los documentos.
Fotografía: Dictamen médico Dulce Esmeralda.
Un cambio total
Para Dulce, la vida no ha sido la misma desde el ataque.
Fue un cambio de 180 grados, gira, pero me gustaría que existiera la justicia; eso para poder dar la misma seguridad a la ciudadanía, externó entre lágrimas.
Dulce Esmeralda no logró realizar la denuncia por ella misma, debido a las secuelas de la quemadura. Por tanto, sus familiares llevaron dicha causa. Sin embargo, el proceso fue abreviado por el juez, lo que facilitó la libertad hacia las personas señaladas por el delito.
Son dos, una por cómplice y el otro pues quien fue el agresor por acción y omisión claro entonces (…) Fueron separadas de la corporación policiaca, ellos aceptaron plenamente la culpabilidad, por tanto, quedaron fuera del instituto, comentó.
La víctima, con secuelas físicas y mentales visibles, externó su miedo al principio del proceso, en la cual “no podía salir”. Pero, la necesidad de justicia fue su impulso a buscar vencer su miedo y llegar hasta la reparación integral del daño.
Nos estamos movilizando porque es la única forma para que nos volteen a ver. Soy elemento de la policía, del ayuntamiento y hasta ahora le podría decir que nadie se ha acercado a mi para agilizar el caso, añadió.
En la entrevista, Dulce se autocorrigió al decir que “no fue un accidente, sino una agresión”, por lo que tiene claro que lo ocurrido no fue una cosa fortuita.
Al mismo tiempo, ella fue víctima de una violencia institucional.
Me acerco al hospital Malibú, que es la instancia que nos brindan para el tema médico y me la negaron. Me cerraron las puertas, mis amistades tuvieron que trasladarme. Entonces, me vi la necesidad de todavía esperar más tiempo para que me fueran a rescatar mis amigas de ahí, y sacarme de ahí y llevarme a la Cruz Roja, dijo.
Por tanto, Dulce Esmeralda ha buscado por diversas instancias la justicia, tanto al ser víctima de violencia ácida como de la institucional. Su activismo, le ha llevado a ser compañera de María Elena Ríos, saxofonista oaxaqueña, quien fuera rociada con ácido por un personaje político; persona quién hasta el día de hoy se mantiene prófuga de la justicia.
Regidora Adriana Guillen y Dulce Esmeralda. Fotografía Diego Pérez.
Violencia institucional
Adriana Guillén, regidora del ayuntamiento capitalino, habló sobre la violencia institucional hacia Dulce, la cual inicia con la negación del apoyo médico por parte del hospital Malibú.
Desde aquí hay una grave omisión. Desafortunadamente, ella estuvo internada alrededor de dos meses, lo que le impidió empezar denuncias en ese momento con las quemaduras que ella presentaba (…) Considero que ha sufrido también una violencia institucional muy fuerte, que es una violencia que luego se invisibiliza, externó.
Uno de los temas fundamentales fue conseguir el dictamen del médico cirujano plástico, el cual otorgó bajo una cantidad de 35 mil pesos; suma de dinero que representaba un reto para la víctima. Aquí, la regidora realizó diversas acciones como rifas con causa, para poder lograr dicha suma; la cual resulta primordial para avanzar en el caso.
El dictamen fue contundente: Dulce necesita al menos cuatro cirugías.
Son quemaduras muy fuertes y no podíamos dejar pasar el hecho de que en un inicio en el juicio decían que eran quemaduras superficiales, así decía en la sentencia. (…) Son heridas que le van a quedar por toda la vida, ella no tiene la movilidad completa en cuello, expresó.
Por tanto, Guillén, Esmeralda y diversas opiniones legales han concluido que la reparación del daño ha quedado limitada, puesto que la y el victimario se extralimitaron en otorgar dichas condiciones a la víctima. En consecuencia, urgieron al poder judicial y en especial al juez, a reconsiderar el dictamen y buscar vías efectivas para la justicia.
Cabe señalar, el caso de Dulce Esmeralda fue juzgado bajo tentativa de homicidio; lo que no reconoce completamente las características de una violencia ácida, debido a que aún no está tipificado en el país.
Se propone una reparación de 1 millón 100 mil pesos, porque eso pagaría las primeras cirugías, medicinas y rehabilitaciones (…) Hace falta una atención integral a las víctimas, por ejemplo, ahora vemos a madres buscadoras que lo único que quieren es sentarse con la autoridad y las escuchen. Nos falta un poco de humanismo, finalizó.
Dulce y la regidora consideraron que las medidas realizadas para darle visibilidad el caso no tendría que ocurrir, si la autoridad estuviera abierta al diálogo. Pero, ante la falta de sensibilidad se tienen que movilizar de diferentes formas.
No es un expediente más, no es una carpeta de investigación más. Es una persona a la cual le dañan su vida para toda la vida, como en el caso de Dulce. Por eso el tema de Elena, la verdad es que ella se acercó con nosotros hace como cuatro meses, nos ayudó a elaborar este dictamen y ella presentó al Congreso de la Unión una propuesta de reforma de ley porque hoy el caso de Dulce está juzgado como tentativa de homicidio, finalizó la servidora pública.
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Este trabajo fue publicado originalmente en Chiapas Paralelo que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar la publicación original.