#8M2025
Con el lema “Desde la rabia, lucha y esperanza”, miles de mujeres, jóvenes y niñas, disidencias, madres, familiares de víctimas de feminicidio y desapariciones, feministas anticapitalistas, mujeres con discapacidad y colectivas diversas tomaron las calles de Guadalajara este 8 de marzo para exigir justicia y visibilizar sus luchas contra la violencia.
La movilización concluyó con un fuerte pronunciamiento por un futuro libre de violencia y la defensa de los derechos de todas las mujeres y disidencias.
Textos y fotos interiores por Aletse Torres / @aletse1799
Foto portada: Agathe Goret / @agathe.goret (IG)
“No son muertas, son asesinadas”, “Ni una más”, “No somos todas, nos faltan miles”, “Hasta que se haga justicia” fueron algunas de las consignas que inundaron las calles de Guadalajara este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Aproximadamente a las 5:00 de la tarde, con el lema “Desde la rabia, lucha y esperanza”, miles de mujeres diversas y disidencias salieron de la Glorieta de la Minerva con dirección a la Plaza de la Liberación.
Marcharon madres y familiares de víctimas de feminicidios y desaparición, mujeres con discapacidad, colectivas anticapitalistas; ecofeministas; defensoras de la vida y el medio ambiente, feministas antiespecistas; maestras feministas, infancias y adolescencias, estudiantes organizadas.
También, tomaron las calles lxs cuerpxs disidentes; lxs gordxs; personas queer y trans; personas con capacidad de gestar; lxs psicologuxs feministas; la comunidad de mujeres de Palestina; madres que luchan contra la violencia vicaria, colectivas de artistas y defensoras de derechos culturales, médicas, médicas, científicas, sobrevivientes de la violencia y miles más.
Durante la gran movilización, el contingente de colectivos buscadores repartieron fichas de búsqueda de sus familiares y colocaron sus rostros en los postes de la ciudad con la esperanza de que más personas pudieran conocer su caso. Así lo hicieron los familiares de María de los Ángeles Briseño Najera, desaparecida el 24 de noviembre de 2022 en Tlajomulco, “estamos aquí por mi hermana y para demostrar nuestra solidaridad”, dijo su hermano.
‘Justicia por Isis’ corearon decenas de asistentes, junto a la familia de esta joven. Isis fue asesinada el 22 de noviembre de 2020 por su ex pareja, Salvador, pese a que han pasado casi 5 años no ha recibido justicia.
“Actualmente, vamos por la última fase, ya solo estamos esperando la fecha para el juicio oral. El juez se encuentra revisando todas las pruebas. Ya tenemos más de 4 años y no tenemos respuesta de nada” comentó su madre.
A lo largo de la Avenida Vallarta, ruta principal del recorrido, varios negocios mostraron su solidaridad con quienes marcharon. Algunos regalaron pulseras con los lemas “Vivas y libres” u “8M”, mientras que, otros ofrecieron agua e instalaron “puntos violeta” (sitios seguros frente a situaciones de riesgo).
La Batukada feminista que como cada año acompaña el recorrido, marcó el ritmo del andar con su enérgico canto: “¡La calle es nuestra!”,
En el contingente Carriola, en su mayoría integrado por madres y sus infancias, la consigna principal, “Las niñxs no se tocan” resonó con fuerza. Exigieron un futuro libre de violencia y discriminación, protección y el respeto a sus derechos, así como, un entorno seguro y libre de abusos en todas sus formas.
Estudiantes universitarias se detuvieron frente al edificio de la rectoría de la Universidad de Guadalajara, para denunciar los actos de violencia de género y de encubrimiento que viven por parte de la institución y sus autoridades, entre ellas, el rector Ricardo Villanueva.
Mientras tanto, a las afueras del museo MUSA, algunas manifestantes llevaron a cabo un performance sobre la menstruación, con este acto recordaron cómo, durante mucho tiempo, este proceso biológico se ignoró y se trató como una enfermedad que debía ocultarse. Con esta intervención, las participantes buscaban reivindicar, visibilizar y desafiar ese estigma.
“¡No más violencia obstétrica!”, exigieron desde ‘Casa Aramara’, destacando que, según datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, el 71.9% de las mujeres en Jalisco de 15 años y más ha experimentado algún tipo de violencia a lo largo de su vida, incluyendo la violencia obstétrica.
En la Rambla Cataluña el contingente por Palestina, ondeó la bandera del país y corearon consignas como “Hasta que sean libres todas las mujeres y niñas de Palestina” y “Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá”, exigiendo el fin del genocidio.
De acuerdo con Protección Civil de Jalisco, alrededor de 30 mil personas salieron a las calles para conmemorar esta fecha (entre las distintas movilizaciones convocadas) dentro del Área Metropolitana de Guadalajara y el estado. A diferencia del año pasado, cuando se recorrieron casi 4 kilómetros, este año el trayecto fue de 5.5 kilómetros, lo que representa un aumento del 37.5% en la distancia recorrida.
En cada calle había policías mujeres con flores en las manos, entregadas por las manifestantes, quienes se aseguraban de que ninguna persona ajena al movimiento ingresara al espacio. Además, integrantes del escuadrón de bomberos de Jalisco vigilaban los lugares donde se habían roto vidrios, garantizando la seguridad de las participantes y evitando que se acercaran más.
Una de las tablas de madera puestas para proteger negocios y hogares fue utilizada para denunciar a sus agresores, con el objetivo de visibilizarlos. Esta tabla se extendió por casi una cuadra, donde se leían lxs nombres de cientos de violentadores de mujeres de Guadalajara.
“Aborto sí, aborto no” y “Saquen sus rosarios de mis ovarios” cantaron las participantes a los grupos antiderechos y religiosos que se encontraban resguardando las paredes de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen.
También marcharon perritos junto con sus cuidadoras, quienes exigieron un feminismo antiespecista, recordando que, aunque no pueden hablar, siguen sufriendo violencia patriarcal y no pueden ser olvidados.
Casi a las 7:20 de la tarde, la cabeza de la marcha llegó al Centro Histórico de Guadalajara, marcando casi el fin de un recorrido que, cargado de consignas y demandas, atravesó varias de las principales calles de la ciudad.
En el kiosco de la Plaza Imelda Virgen, las víctimas de violencia vicaria tomaron el espacio para exigir una respuesta a las autoridades sobre sus casos, el regreso de sus hijas e hijos sustraídos por sus agresores y el reconocimiento de la violencia vicaria en México.
“Nos declaramos en lucha, en resistencia y en acción. La fuerza es para parar esta violencia vicaria, por las que ya no están y por las que estamos, por todas” expresó una de las integrantes.
Al llegar a Plaza Liberación, la energía de lxs contingentes seguía intacta, reflejando la determinación de quienes, pese a las horas de caminata, seguían luchando por un futuro libre de violencia y justicia.
La Batukada tocó unas últimas canciones, llenando el ambiente de ritmo y energía. En ese momento, madres e infancias bailaron al compás de la música, convirtiendo el acto en una manifestación de resistencia y celebración de la vida.
A las 8:00 de la noche, miles de voces leyeron el pronunciamiento que este año preparó la red “Yo Voy 8M”.
“Hoy nuestra rabia se convierte en fuerza colectiva. Hoy la resistencia se transforma en oposición. Hoy seguimos creando esperanza desde la furia” expresaron.
Después, las familiares de Isis, en representación de las familias de víctimas de feminicidio y desapariciones, agradecieron el espacio y pidieron justicia por todas las mujeres y personas que han sido atravesadas por la violencia.
Por su parte, las integrantes de “Tapatías Discas” comentaron que su lucha no es individual, sino colectiva, y destacaron que no son invisibles, afirmando que las mujeres con discapacidad son mujeres que también luchan.
Para finalizar, gritaron al unísono: “¡Nunca más una lucha, ¡sin todas y todes!” y el acto concluyó con un grupo reunido, donde los colores morado y verde se entrelazaron, reflejando la fuerza y unidad de la lucha que continúa, llena de esperanza y rabia.