En Pie de Paz
Por Francisco Javier Lozano Martínez ** y Rosana Ruiz Sánchez**
Durante los días 18 al 21 de septiembre se celebró en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, la 19ª Cumbre Mundial de Premios Nobel por la Paz. A ella pudimos asistir una delegación de 35 universitarios, representando a la Universidad de Guadalajara.
La Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz es un evento internacional que reúne a laureados del Premio Nobel de la Paz de las últimas décadas; organizaciones sociales que imparten talleres de construcción de paz; líderes políticos de alto nivel; activistas y jóvenes de distintas partes del mundo, universitarios, científicos y académicos. El propósito de la Cumbre es promover el diálogo sobre temas globales relacionados con la paz, los derechos humanos, el desarme, la sostenibilidad, la justicia social, y en este año, el uso de la Inteligencia Artificial. Su objetivo principal es generar acciones y recomendaciones concretas para la construcción de la paz mundial, fomentando la colaboración entre diferentes sectores y destacando el papel de la sociedad civil, el sector educativo y los gobiernos democráticos en la resolución de conflictos y la propia pacificación.
Al asistir a este evento, fuimos testigos de que es uno de los eventos más significativos en el ámbito internacional, donde se aborda la promoción de la paz y los derechos humanos con un peso enorme de los discursos y las posturas, al exponer hombres y mujeres de talla global que han sido ejemplo a través de sus vidas y sus acciones de que otro mundo es posible si se lucha por la paz. El mensaje central es claro: se puede construir una plataforma de diálogo y acción para enfrentar los desafíos más urgentes del mundo, como los conflictos armados, la desigualdad, las amenazas nucleares, el cambio climático y las violaciones a los derechos humanos. La Cumbre también busca empoderar a nuevas generaciones y fortalecer la colaboración entre diferentes actores de la sociedad para transformar las realidades globales. Mientras se desarrolló la Cumbre, los jóvenes tuvieron un programa especial en el Encuentro Mundial de Valores, donde debatieron sobre los conflictos del mundo y las formas en construir la paz. Construyeron y firmaron una declaración por la paz muy profunda y emotiva que leyeron a todo el auditorio al final del evento.
Desde su primera edición en 1999, la Cumbre ha evolucionado hasta convertirse en un referente global en temas de paz y justicia social. Lo que comenzó en Roma, Italia, como una reunión pionera de laureados del Nobel convocados por Mijaíl Gorvachov, ha trascendido a un evento itinerante que ha tocado diversas ciudades alrededor del mundo, desde Ciudad del Cabo hasta Bogotá, Barcelona, Mérida, Seúl y ahora en Monterrey. El valor central de la Cumbre radica en abrir un espacio de diálogo, debate, análisis, reflexión y crítica, para lograr inspirar a los asistentes para generar posturas firmes y radicales en contra de la violencia, la guerra, el crimen organizado, la pobreza y el autoritarismo. “I commit to peace” fue la respuesta a la que fuimos desafiados todo el tiempo.
Los paneles de la Cumbre abordaron temas fundamentales para la construcción de la paz global. En “Global Peace Architecture”, se analizó la relevancia de la estructura actual de paz y las barreras que impiden su sostenibilidad, como la falta de cooperación internacional y los conflictos geopolíticos. En el panel “Planet Call: Balancing Progress and Nature” evaluó la crisis ambiental, enfatizando la necesidad urgente de regenerar el suelo y adoptar prácticas sostenibles para garantizar la salud del planeta. En “What if ‘War’ is Obsolete”, se discutieron los devastadores efectos de las guerras recientes y se propusieron alternativas no violentas, como la prevención de conflictos y el desarme, para lograr una paz duradera.
El panel “Facing Violence and Delinquency: The Silent War” se centró en la inseguridad y el crimen organizado, sugiriendo reformas políticas, cooperación internacional y soluciones tecnológicas para mitigar la violencia. “National Dialogue” evaluó el impacto de la polarización política y el discurso de odio en México, lanzando la campaña ‘Yo me Comprometo con la Paz’ como respuesta. “Technology, AI, and Ethics” reunió a laureados y expertos para discutir la ética en el uso de la inteligencia artificial en la prevención de conflictos y la construcción de la paz. Finalmente, el panel “Global Peace: Education and Integral Formation” sintetizó las discusiones previas, proponiendo pasos concretos para fortalecer la paz mediante valores colectivos y la educación integral.
Para nosotros, hubo un espacio fundamental para inspirar y generar conciencia sobre la lucha por la paz: el momento del programa que daba espacio al “Nobel inspiration”. Los laureados con el Premio Nobel de la Paz que asistieron a la Cumbre han dedicado sus vidas a la lucha pacífica por los derechos humanos, la democracia y la justicia social en distintas regiones del mundo. Fuimos inspirados todos los días por ellas y ellos, a través de sus potentes mensajes.
Tawakkol Karman y Leymah Gbowee se destacaron por su liderazgo en la defensa de los derechos de las mujeres y la democracia en sus respectivos países, Yemen y Liberia, durante momentos cruciales de cambio político y conflicto. Junto a Shirin Ebadi, quien también defendió los derechos de las mujeres y los refugiados en Irán, han sido voces poderosas en la lucha por la equidad y la paz en sociedades profundamente marcadas por el conflicto y la opresión. Kailash Satyarthi, ha dedicado su vida a erradicar el trabajo infantil y la explotación económica de los niños, inspirando cambios a nivel mundial en la defensa de los más vulnerables. Rigoberta Menchú como líder indígena guatemalteca, activista de los derechos humanos y escritora, ha sido reconocida internacionalmente por su lucha en defensa de los derechos de los pueblos indígenas y su papel en la promoción de la justicia social en Guatemala.
Líderes políticos como Oscar Arias Sánchez (ex presidente de Costa Rica), José Ramos-Horta (Presidente de Timor Oriental) y Lech Wałęsa (ex presidente de Polonia) jugaron roles clave en la construcción de la paz y la democracia en sus países. Oscar Arias fue fundamental en poner fin a las guerras civiles en América Central mediante la diplomacia, mientras que Ramos-Horta contribuyó a la independencia de Timor Oriental. Lech Wałęsa fue un actor crucial en la caída del comunismo en Europa del Este. Ouided Bouchamaoui, como parte del Cuarteto para el Diálogo Nacional en Túnez, ayudó a guiar a su país hacia una democracia pluralista después de la Revolución Tunecina.
Estos hombres y mujeres, a través de sus esfuerzos diplomáticos, políticos y sociales, han contribuido significativamente a la construcción de un mundo más justo y pacífico. Se suma a las acciones y voluntades de muchas organizaciones, universidades, activistas y personas que de alguna u otra forma nos relacionamos con la construcción de la paz. ¿Cómo no regresar inspirados para seguir trabajando por esto con la investigación, la educación y la promoción de la paz en nuestros propios contextos?
El valor de la cumbre radica en su enfoque multifacético, inclusivo y global. No se limita únicamente a los laureados del Premio Nobel de la Paz, sino que involucra a líderes políticos, religiosos, empresariales, actores académicos, científicos y sociales que compartimos la visión de que un mundo más justo y pacífico es posible.
Es la segunda vez que México ha recibido la Cumbre, y aún así, estamos muy lejos de lograr la paz que tanto anhela nuestro país. La violencia, el crimen y la impunidad siguen siendo los principales problemas que aquejan a nuestras comunidades y ciudades obstaculizando una plena construcción social y política por la paz. No obstante, regresamos con una visión renovada y más amplia de lo que nos toca hacer como sociedad y como academia: educar e investigar por la paz sigue siendo nuestra tarea. We commit to peace.
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Profesor universitario. Certificado Internacional en Cultura de Paz y Gestión de Paz Vinculativa. Miembro del Cuerpo Académico UDG 1097 “Cultura de paz y participación ciudadana”. Integrante del Centro de Estudios de Paz (CEPAZ) del Instituto de Justicia Alternativa de Jalisco (IJA). Correo: francisco.lozano@udgvirtual.udg.mx
Profesora universitaria. Coordinadora de la Licenciatura en Seguridad Ciudadana del Centro Universitario de Guadalajara, UdeG. Miembro del Cuerpo Académico UDG 964 “Seguridad ciudadana y régimen jurídico de los organismos descentralizados”. Miembro del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores SNII. Correo: rosana@udgvirtual.udg.mx
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