#HazDeporteComoNiña
Pilar Valdes, 67 años, maratonista y senderista.
Por Isabella Jiménez Robles
Ilustración por: Diana Vega | @diana.mandarina
Cuando era niña, Pilar Valdes montaba caballos que aún no estaban bien domados y aprendió a nadar en el mar y los ríos de los ranchos. Ella nació en Guadalajara en 1955, pero creció en Coahuila. Es la menor de diez hermanas y hermanos. Su papá venía de una familia que practicaba la charrería; él le enseñó a no tener miedo.
Se mudó a Guadalajara en los años ochenta para estudiar administración de empresas en la Universidad Autónoma de Guadalajara. Compitió en salto a caballo desde la secundaria hasta que se convirtió en mamá. Cuando llevó a su hija e hijo a clases de natación, encontró el tenis y participó en torneos. Después, comenzó a correr cuando tenía 40 años.
Estrenó el Parque Metropolitano, el cual se inauguró en 1997. Sigue siendo su lugar preferido para entrenar. Pilar fue de las primeras personas en Guadalajara en participar en maratones, cuando apenas se empezaban a organizar carreras en la ciudad.
La preparación para correr distancias largas cambió su alimentación y todo su estilo de vida; cuando los demás salían por la noche, ella dormía para levantarse a las 5 AM del día siguiente. Los fines de semana salía al campo para correr con sus amistades. Pilar calcula que participó en casi cuarenta medios maratones antes de correr su primer completo en La Laguna, Coahuila.
Ella y sus amigas corredoras, por ser las primeras, sentían que se debían a la República Mexicana. Pilar ha corrido en Cancún, Mazatlán, Puebla, Ciudad de México, Monterrey y otras ciudades. Desde entonces aconseja a las personas que corran en su país antes de ir al extranjero.
Viajó sola a Nueva York para hacer primer maratón en el extranjero. Quiso participar como un regalo para su nieta: “que tenga una abuela que está corriendo un maratón”, dijo. Ninguna de sus compañeras y compañeros habituales pudo ir; entrenó como nunca al saber que no iba a poder depender de su grupo, tendría que depender de ella misma.
Estuvo a punto de abandonar la carrera cuando se enteró de que quedaría empapada al cruzar los puentes sobre el mar en pleno otoño. Pero un grupo de corredores europeos la animaron y le explicaron cómo cubrirse del agua. Le pareció que toda la gente a lo largo de los cinco barrios de la ciudad se volvió amable sólo para el evento. Cuando volvió a su hotel se dio cuenta de que había regresado antes que sus compañeros de cuarto, una pareja joven. Corrió más rápido que ellos.
En 2015 hizo su último maratón internacional en Berlín. Descubrió que correr era su forma preferida de viajar; las puertas de la ciudad se abrieron para ella.
Después de más de veinte años corriendo, Pilar ya no participa en maratones, dice que llegó a su meta. Aún corre y las piernas le siguen respondiendo de maravilla. Durante la pandemia hacía yoga en videollamada con una de sus hermanas, quien es instructora de adultos mayores. Siguen siendo una familia muy deportista. Ambos de sus hijos han corrido con Pilar y ella ha entrenado a otras jóvenes. Un día que su nieta fue a la Barranca de Huentitán con su escuela, la presumió diciendo “nosotros no podemos ni caminando, pero mi abu la baja y la sube corriendo”.
Ahora, Pilar hace senderismo. A sus 65 años escaló el Nevado de Colima desde la base hasta la cumbre (y de regreso). También ha recorrido el Volcán de Tequila y la ruta de Talpa, entre otros senderos de Jalisco. Pronto le gustaría ir al Camino de Santiago con quienes hoy comparte la pasión con el deporte. A Pilar le atrae el senderismo por ser más contemplativo:
“Estoy en esa etapa de buscar los paisajes y el reto de la montaña, de estar con otras personas y platicar”.
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“#HazDeporteComoNiña, periodismo narrativo sobre desigualdades que viven niñas, adolescentes y mujeres en el deporte” es un proyecto ideado por Fundación Marisa en el que ZonaDocs colaboró con el reporteo y redacción de los perfiles de mujeres deportistas.
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