Comunidad LGBTIQ+
En el marco del Mes del Orgullo, alrededor de 150 mil personas LGBTIQ+ y aliadas salieron a marchar por las calles de Guadalajara, y lo hicieron desde la Glorieta de La Minerva hasta la Glorieta de las y los Desaparecidos.
El objetivo fue visibilizar los derechos faltantes de la comunidad LGBTIQ+ ; así como la relevancia de sus existencia y resistencias ante el odio que reciben todos los días, por ser solamente ellxs.
Texto y fotos por Aletse Torres / @aletse1799
“Vergüenza debería de darte tu odio”, “Nada que curar”, “Juntxs somos más” fueron algunas de las consignas que quedaron plasmadas en las pancartas de quienes asistieron a la Marcha del Orgullo GDL realizada, el pasado 8 de junio, de la Glorieta de La Minerva a la Glorieta de lxs desaparcidxs de Jalisco.
Este año, lxs integrantes de la comunidad LGBTIQ+ marcharon bajo la consigna “El crimen no es amar, el crimen es odiar”, esto con el propósito de visibilizar el impacto de los discursos de odio en la población LGBTIQ+.
Asimismo, marcharon para exigir justicia para quienes han sido víctimas de crímenes de odio y para que se les garanticen a todas las personas de la comunidad sus derechos. Recordemos que se han registrado 305 hechos violentos motivados por el odio de 2019 a 2022, incluyendo: asesinatos, desapariciones, atentados a la vida y suicidios, según el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra Personas LGBTI+ en México.
La Marcha del Orgullo GDL inició a las tres de la tarde y fue encabezada por la familia de Jesús Eduardo “Pollo” Flores Campo, desaparecido el 26 de mayo de 2015 en San Cristóbal de la Barranca, Jalisco.
Para Janet Flores (ella), hermana del “Pollo”, no fue su primera marcha, pues cada año sale a exigir el regreso de su hermano. Para ella, la esperanza y la fe han sido el motor de su familia para seguir caminando junto con otras familias buscadoras.
“Hay que seguir adelante y demostrarle que de alguna forma todavía estamos con él y por qué lo haría por mí. Si yo hubiera sido la desaparecida, él jamás se habría rendido hasta encontrarme”, expresó la buscadora.
A su lado, se encontraba la señora Ana (ella), mamá de Kenia Duarte García, mujer trans desaparecida junto con su amiga Karla García Duarte, el 18 de septiembre de 2020 en Zapopan, Jalisco. Su madre comentó que a casi cuatro años de su desaparición, las autoridades no han obtenido resultados y parece que “han olvidado el caso”.
Hasta septiembre de 2023, el gobierno no había acatado la Acción Urgente ante el Comité Contra la Desaparición Forzada de la ONU, enviada el 8 de octubre de 2020.
En México, se ha documentado la desaparición de 124 personas LGBT+ en los últimos doce años, de las cuales 69 personas permanecen desaparecidas, según el Centro de Apoyo a las Identidades Trans (CAIT).
Si bien, esta cifra puede que no coincida con registros oficiales, esto debido a que las personas de la diversidad sexual han sido subrepresentadas en las estadísticas oficiales, lo que obstaculiza el dimensionar la crisis de derechos humanos de dicha población.
Una comunidad que apoya
“Creando sonrisas” fue una de las organizaciones que asistió para apoyar las exigencias de cero violencia hacia lxs integrantes de la diversidad. Eduardo Patiño (él), presidente de la ONG, comentó que su objetivo principal es apoyar a lo que son pues a las infancias en situación de calle, casas hogar bajo un eje interseccional que reconozca los derechos de todes.
“Esperamos poder ayudar a todas las personas, si tienen algún problema que tengan se acerquen a nosotrxs. Por eso estamos aquí, para que nos conozcan y sepan que no están soles”, sentenció el activista.
Con una lona que mostraba los crímenes de odio hacia la comunidad LGBTIQ+ en el país y cubierto de sangre (de forma simbólica) caminaba Alberto (él) junto con sus amistades.
El decidió marchar este año para mostrar el “nivel de intolerancia” hacia las personas de la diversidad que hay en México y seguir exigiendo protocolos que investiguen los crímenes de odio bajo un enfoque interseccional y justicia para todas las personas que han sido asesinadas.
Como dato, Fundación Arcoíris ha registrado 452 casos de asesinatos hacia personas diversas, en los últimos 10 años (desde 2014 hasta 2024), de los cuales 16 corresponden a los meses transcurridos este año.
Más adelante, se encontraba Sauleme (él) junto con su esposo. La pareja decide marchar por segunda ocasión para agradecer a quienes han caminado antes que ellos y gracias a sus esfuerzos, han logrado avances como el matrimonio igualitario.
“Gracias a la comunidad, pues nosotros nos pudimos casar entonces como agradecimiento a toda la comunidad, pues venimos todos los años a las marchas”, manifestó el asistente.
También, decidió marchar en representación de todas las personas LGBTIQ+ pertenecientes a pueblos originarios para visibilizar su existencia dentro de sus comunidades, pero también por fuera y combatir los estereotipos que les rodean.
“Queremos tolerancia, visibilidad y la libertad sobre todo de expresión y de vivir como nosotrxs queremos”, finalizó Sauleme.
“Mi hermanx es mi superhéroe favorito” es el cartel que cargaba el hermano menor de Christopher (elle, ella, él). Es la primera marcha a la que asiste con sus tres hermanxs, quienes desde corta edad han comprendido la identidad de elle.
Como persona no binaria, el camino de Christopher ha sido solitario, puesto que las personas fuera de su familia le han excluido y violentado con prejuicios sobre su identidad y expresión de género. Pero tener el apoyo de sus hermanxs menores y en general, de su familia le ha ayudado a seguir encontrándose.
Para elle, es primordial hablarle a las infancias sobre otras realidades, las de la comunidad LGBTIQ+, las identidades, orientaciones sexuales y la expresión de género para evitar que crezcan con prejuicios y repliquen violencias:
“Me parece bien importante hablar de espacios para infantes y que conozcan como toda la diversidad no sé si realmente creo que es lo que siento porque siento que muchas personas tienen miedo de hablar de estos temas porque piensan que se van a confundir, pero eso no pasa. Tú tienes bien claro lo que te gusta y que vengan a la marcha y que se eduquen un poquito sobre esto no va a hacer que cambien de desorientación para nada”.
Como apoyo hacia las personas LGBTIQ+, Irma (ella) decidió realizar un cartel ofreciendo sus abrazos como “mamá”. Es la tercera marcha a la que asiste acompaña a su familia, y pese a que solamente es una aliada, considera importante acuerpar a quienes han sufrido violencia y le han hecho sentir mal por simplemente ser ellxs.
“Yo marcha justo bajo la exigencia del amor, del respeto y del cariño mija, porque mucha gente nosotros no respetamos a quienes son diferentes, no se porque, pero no existe esa tolerancia. Y lo que yo puedo darles, es todo el cariño del mundo”, puntualizó la madre.
Por su parte, Eduardo (él) cargaba un cartel similar donde se leía “abrazos de papá”. Esta fue su primera marcha junto con su hijo Jóse (él)y su esposa Denisse (ella), con el propósito de apoyar a su hijo, quien hace un año compartió su identidad (hombre trans).
Asimismo, la familia marchó por todas las personas trans que han tenido que ocultar su identidad y no cuentan con un espacio seguro en casa o en su contexto cercano.
Por lo mismo, el padre decidió dar un poco de su cariño y admiración que tiene hacia su hijo, para otras personas de la marcha que han sido rechazadas en casa, para decirles que “no son diferente, que son excelentes”.
“Creo que tenemos que luchar por el sentido común desde que todos somos personas y todos podemos convivir sanamente, tolerar, respetar y proporcionar las mismas oportunidades y derechos”.
Al llegar a la Glorieta de Lxs Desaparecidxs, el bloque Crítico Disidente leyó un pronunciamiento donde compartieron que su marcha no es de dinero rosa esta marcha, no es de las empresas, sino que es suya.
Siguiendo esta misma línea, exigieron el respeto a sus derechos humanos, junto con la prohibición a los discursos de odio, la homologación en materia de ECOSIG a nivel estatal, la tipificación de crímenes de odio y transfeminicidios, la creacion de políticas públicas hacia la población de diversidad sexual.
Tambien, pidieron la reglamentación de la ley contra la discriminación en todos los municipios del estado y la modificación al reglamento de los registros civiles para que parejas del mismo sexo puedan registrar a sus hijxs.
“Hoy decimos no a la transfobia, no a la bifobia, no a la lesbofobia, no a la discriminación en contra de las personas no binarias, no a la homofobia, no a la violencia hacia las personas LGBTIQ+. Nunca más”, sentenciaron lxs activistas.