Luego de “agotar todas las vías pacíficas” y esperar por dos años que el Congreso de Jalisco apruebe la #LeyVicaria, la colectiva Madre yo sí te creo ha comenzado a reunir firmas ciudadanas para exigir a las y los legisladores, así como, al ejecutivo estatal que den celeridad a los procesos que mantienen “congelada”. Esta propuesta de ley significa un avance para los derechos de las mujeres, infancias y adolescencias que están viviendo esta forma de violencia en razón de género. Y es que, Jalisco es una de las últimas cuatro entidades en todo el país que aún no aprueban la #LeyVicaria.
Reconociendo que “esta lucha es de todas”, se instalaron este viernes 8 de marzo frente a la Glorieta de las y los desaparecidos para pedir la solidaridad y la empatía de cada persona asistente a las movilizaciones convocadas para la jornada feminista, sin importar su posicionamiento o reivindicación.
Más de 11 mil firmas recolectaron durante esta primera acción.
Por Dalia Souza / @DaliaSouzal
“Entendemos que esta lucha es de todas y para todas”, afirma Nato Montes, fundadora de Madre Yo Sí Te Creo, colectiva que reúne a cerca de una centena de mujeres que se enfrentan a la violencia vicaria en Jalisco. Por eso, este 8 de marzo decidieron accionar en la calle, pero esta vez sin marchar, para pedir la solidaridad de cada persona asistente a las movilizaciones por el #8M en el Área Metropolitana de Guadalajara.
Posicionadas sobre el andador Chapultepec, frente a la Glorieta de las y los desaparecidos instalaron el toldo que les suele acompañar a cada una de sus actividades públicas y con varios cientos de hojas y plumas a la mano llamaron a solidaridad y la empatía.
“Compañeras, estamos recolectando firmas para la legislación de la violencia vicaria, con su firma nos ayudan a recuperar a las crías sustraídas. Muchas mamis de las que estamos aquí nos han quitado a nuestras crías, los agresores con tal de que no los dejemos y no los denunciemos nos quitan a nuestras hijas e hijos. Su firma es muy importante para nosotras” explicaban las madres con su altavoz.
Nato Montes siempre ha sido clara en reconocer que la lucha de las madres contra la violencia vicaria está más allá de los desacuerdos que recientemente han dividido a los feminismos -y con ello a las feministas-. Por ello, reivindicar sus acciones desde este espacio -el punto de salida y llegada de las dos marchas convocadas: la separatista y la marcha incluyente- más allá de los posicionamientos políticos, es un llamado a la acción colectiva y al reconocimiento de esta forma de violencia que es poco identificada por sus víctimas:
“No importaba en qué marcha querían estar. Este punto es el punto medio entre ambas, donde podemos enseñarles a muchas compañeras qué es la violencia vicaria, porque todavía hay muchas que nos veían con asombro y nos decía: “¿esta es la violencia vicaria?, que les quiten a sus hijos o que les amenazan con quitarles a sus hijos”. Queremos seguir visibilizando y que tomen todas empatía con las madres, por eso decidimos quedarnos aquí”.
Pero también, esta es una acción que deviene del hartazgo, del cansancio y la espera a la que han sido sometidas por parte de las autoridades legislativas y ejecutivas. Han pasado dos años desde que fue presentada la iniciativa de #LeyVicaria en Jalisco, una de las primeras en llegar a los congresos en las entidades a nivel nacional.
“Qué más nos queda hacer que presión social y demostrarle al Estado que no sólo somos nosotras, las colectivas y las mujeres que sufren violencia vicaria, somos todas las personas, que les interesa proteger a estas infancias y a estas madres”.
La propuesta de ley a cargo de la diputada Dolores López Jara fue aprobada por la Comisión de Igualdad Sustantiva y de Género, pero todavía no hay fecha para que pase al pleno y sea finalmente votada.
De acuerdo con la colectiva, durante este tiempo tanto el Congreso de Jalisco como la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres (SISMH) se han “echado la bolita” sobre quién es la responsable de dar paso a la votación del documento de ley con las adecuaciones solicitadas por distintas agrupaciones, colectivas, personas y grupos parlamentarios.
“Mientras tanto, las que seguimos luchando y las que seguimos esperando somos nosotras” advierte Nato Montes de Madre yo sí te creo. Por esa razón, dice, “este es el último estirón que damos”, ya que, recientemente la Colectiva Amorosas Madres contra la Violencia Vicaria, CAM-CAI presentó un amparo -que ya fue aceptado- por la dilación de los procesos legislativos en la materia.
CAM-CAI es la primera agrupación en México que abiertamente buscó nombrar y denunciar la violencia vicaria. Ahora mismo más de 800 mujeres pertenecen a esta organización nacional.
Tan sólo durante la jornada del 8 de marzo buscaron recabar cerca de 11 mil firmas de las personas asistentes a las movilizaciones dentro del Área Metropolitana de Guadalajara, sin embargo, se trasladarán a otros municipios al interior del estado para ampliar su alcance, sobre todo, para llegar a más mujeres que estén atravesando por esta violencia.
De acuerdo con el reportaje “Madre yo sí te creo: la lucha contra la violencia vicaria en Jalisco” de ZonaDocs, en Jalisco, aunque no existe el tipo penal de violencia vicaria, entre 2020 y agosto de 2023 se han abierto cinco carpetas de investigación por este delito. Las denuncias fueron presentadas en los municipios de Villa Hidalgo, Autlán de Navarro, Ojuelos de Jalisco y Lagos de Moreno, al interior del estado. Ninguna de estas ha sido judicializada.
Las firmas serán contabilizadas públicamente por una abogada aliada del movimiento y serán entregadas con un posicionamiento a las y los legisladores del Congreso de Jalisco, a la Secretaría de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres, así como a la Secretaría de Gobierno.
En México 31 estados han presentado #LeyVicaria en sus congresos, Durango es la única entidad que no lo ha hecho. De estos 31, 27 la han aprobado, no obstante, las legislaciones de Coahuila y Quintana Roo carecen de perspectiva de género y por tanto no garantizan la protección de los derechos humanos de las mujeres, las infancias y adolescencias.
Al ser leyes mixtas, es decir, que conciben a hombres y mujeres por igual como potenciales víctimas de este tipo de violencia, se obvian las consideraciones previstas dentro del artículo 7 bis de Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida de Libre de Violencia el cual establece que esta es una de las expresiones de la violencia contra las mujeres en razón de género.
Por lo tanto, como un delito autónomo del que sólo pueden ser víctimas las mujeres por su condición de género.
De tal forma que, los estados pendientes por legislar son: Chihuahua, Veracruz, Tabasco y Jalisco.
“Es vergonzoso. En Jalisco es una prueba muy tangible de su misoginia y de su machismo. Eso es lo que demuestra Jalisco, ser un estado machista y misógino al no aprobar la ley vicaría” afirma Nato.
Para la colectiva Madre yo sí te creo, la ley vicaria es muy necesaria, de ahí su urgencia porque sea aprobada; sin embargo, reconocen que ésta tendrá que ir acompañada de protocolos y reglamentos de actuación, así como de capacitaciones para el funcionariado encargado de sancionar esta forma de violencia dentro de las instancias de procuración de justicia, investigación y atención. Especialmente, dentro de las fiscalías y ministerios públicos del Centro de Justicia para las Mujeres.
“Sí es muy necesaria la ley, pero también es necesario un cambio muy radical en la Fiscalía del Centro de Justicia para las Mujeres, porque por más bien edificada que esté la ley, si los MP siguen redactando mal nuestras denuncias nada nos va a servir”.
Aunque, de hacerlo y hacerlo bien, advierte Nato, esta legislación cumplirá con su objetivo y se convierta en una herramienta para que las mujeres que viven violencia de género, machista o feminicida puedan defender a sus hijas e hijas de sus agresores vicarios:
“Que cada mujer que llegue al Centro de Justicia no nada más llegue a denunciar lesiones, violencia familiar, intento de feminicidio, sino que ahora pueda denunciar la violencia vicaria y sea un apoyo más integral y puedan proteger a sus crías”.
