#HazDeporteComoNiña
Mayra Elizabeth Torres García, 30 años.
Deportista de Muay Thai.
Por Martha Guillén / @MarthaGuilln13
Ilustración por: Alejandra Artiga | @loopartdesign
Mayra Elizabeth Torres García es licenciada en Relaciones Internacionales. Nació el 11 de mayo de 1992, creció en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, practicando deportes como el voleibol, basquetbol, natación y por muchos años su deporte favorito: atletismo.
Se considera a sí misma como una mujer privilegiada por ser hija de dos deportistas y profesores de educación física que siempre priorizaron que ella tuviera el tiempo y todos los recursos necesarios para que se desenvolviera en cualquier deporte que quisiera. Por ello, desde niña, lo que más ama es desarrollar su destreza motriz.
El apoyo de sus padres fue su principal motor, desde pequeña notó que otras niñas no tenían la misma oportunidad que ella. Veía que era común que los niños fueran impulsados y motivados a practicar fútbol, pero las niñas -por su parte-, lejos de ser alentadas a practicar algún deporte tenían que estar en casa aprendiendo sobre las tareas del hogar.
Desde hace poco más de tres años Elizabeth tuvo que dejar Tlajomulco y mudarse al centro de Guadalajara, un lugar que considera peligroso y violento para cualquier mujer. La violencia y la inseguridad son ahora su principal motivación para entrenar artes marciales.
Hace dos años incursionó en el Muay Thai, comenzó como un espacio para convivir con sus amistades:
“y a la par venía yo reflexionando acerca de la necesidad de desarrollar herramientas de autodefensa para poderme sentir más segura en la calle, me dije ¿Qué puedo hacer para sentirme más segura?, pues estar ejercitada, tener buen cardio para poder correr y herramientas para poder reaccionar”.
De niña era fan de Ana Gabriela Guevara, pero ahora se inspira en ella misma y en poder apoyar a sus amigas para que también puedan sentirse seguras de caminar por la calle.
Elizabeth reconoce que la brecha diferencial de género en este deporte ha sido uno de los mayores retos a enfrentar, es más común que los hombres se desenvuelvan a nivel profesional en el Muay Thai y en las artes marciales que las mujeres, pues sistémicamente a las ellas no se les inculca el uso de la fuerza física.
“Ha sido todo un viaje de cómo entender la violencia sistémica, la violencia física y como nosotras lo estamos transformando en autodefensa. Esa transmutación de cómo yo puedo ser capaz de defenderme o de ejercer con mi cuerpo fuerza hacia otra persona. Es algo en lo que no estamos preparadas la mayoría de las chicas porque no crecimos con eso, no es lo que se nos alienta a hacer porque en este mundo no tendríamos que ser violentas”.
En dos años que lleva entrenando Muay Thai, considera que sus mayores logros han sido el desarrollo de su disciplina, de su capacidad de asombro y, sobre todo, sentirse más segura en la calle y el mundo al saber que cuenta con herramientas para defenderse.
Su principal meta a largo plazo con el Muay Thai es: “estudiar desde un enfoque más político acerca de la violencia de género y empezar a desconfigurar violencias y que este sea un espacio acompañado de reflexión”, porque, aunque está aprendiendo a usar su fuerza física, no es su objetivo ejercer violencia sobre otras personas, sino contar con las herramientas para saber cómo autodefenderse.
**
#HazDeporteComoNiña, periodismo narrativo sobre desigualdades que viven niñas, adolescentes y mujeres en el deporte” es un proyecto ideado por Fundación Marisa en el que ZonaDocs colaboró con el reporteo y redacción de los perfiles de mujeres deportistas.
***
“La importancia de la autodefensa en un mundo tan violento para las mujeres”