Por segundo día consecutivo, las autoridades de la Ciudad de México no asistieron a la mesa de diálogo convocada por la comunidad Otomí, que mantiene tomadas las instalaciones del INPI.
Por Mario Marlo / @Mariomarlo
Por segunda ocasión consecutiva, las autoridades de la Ciudad de México no acudieron a la mesa de diálogo convocada por la comunidad Otomí, que desde el 12 de octubre de 2020 mantiene tomadas las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), rebautizado como Casa de los Pueblos y las Comunidades Indígenas: Samir Flores Soberanes.
La comunidad indígena ha mantenido cerrada la avenida México – Coyoacán de la Ciudad de México desde el pasado 11 de octubre como una medida de presión para que las autoridades accedan a entablar un diálogo sobre sus demandas.
Dentro de las peticiones de los indígenas se encuentran el derecho a una vivienda digna, la alimentación, el trabajo digno, la justicia, la democracia, la salud, la paz y la protección del agua en las comunidades indígenas.
La comunidad Otomí recordó que el pasado 16 de octubre, a pocos días de celebrarse el 531 aniversario del Día de la Resistencia y la Dignidad Indígena, el gobierno de la CDMX, envió a más de 200 elementos antimotines para intentar liberar la avenida y desalojar la Casa de los Pueblos.
“Estamos aquí en la Casa de los Pueblos, cerrando la avenida México Coyoacán por nueve días, como una acción de protesta y resistencia. Hemos solicitado audiencia de manera insistente al jefe de gobierno, Martín Guadarrama, porque creemos que es el único con el que podríamos tener interlocución y llegar a algún acuerdo sobre las obras pendientes, especialmente en el caso de Zacatecas 74 y la expropiación del edificio que ocupamos”.
La comunidad insiste en la necesidad de un diálogo y la participación del Gobierno de la Ciudad para resolver sus demandas. Exigen que se establezca una mesa de diálogo como el paso fundamental para poner fin al cierre de su plantón.
En entrevista detallaron que la ausencia de las autoridades en la mesa de diálogo deja en evidencia que el Gobierno de la Ciudad de México no quiere resolver las demandas de la comunidad.
“Desde este espacio de lucha y resistencia estamos exigiendo con carácter urgente que el Gobierno de la Ciudad escuche a la comunidad y así resolver nuestras exigencias”.
Finalmente advirtieron que el cierre de la Avenida México – Coyoacán y la toma del INPI continuaran hasta que no se de solución a sus demandas, a la que se ha sumado la expropiación del edificio del INPI, ahora Casa de los Pueblos y las Comunidades Indígenas: Samir Flores.