“Brechas de género en la práctica del deporte, profesionalización y como campo laboral en el AMG” es el nombre del diagnóstico elaborado por Fundación Marisa con el objetivo de conocer la situación actual sobre el acceso al deporte en mujeres, adolescentes y niñas en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG); el estudio abarca desde la práctica cotidiana, la participación profesional en competiciones y el campo laboral de las mujeres dentro del deporte.
Uno de los hallazgos del diagnóstico es que la brecha de género en el deporte en el AMG es del 50.3%., pues sólo el 33.2% de las mujeres practican algún deporte.
Por Aletse Torres Flores / @aletse1799
“¿Qué ventajas tenemos como sociedad si son más las mujeres que se involucran en el ecosistema deportivo?” es una de las preguntas que llevaron a quienes integran la Fundación Marisa a realizar, en conjunto con Demoscópica México, un diagnóstico que para identificar las principales brechas entre mujeres y hombres en el ecosistema deportivo, específicamente en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG).
El objetivo del proyecto fue conocer la situación actual de las condiciones de acceso al deporte de mujeres, adolescentes y niñas, tanto para su práctica, participación profesional en competiciones, así como su incorporación al campo laboral dentro del deporte.
Asimismo, buscaron distinguir las características de la oferta pública y privada en cuanto a sus horarios, costos, así como la composición de las personas responsables del entrenamiento; de la misma manera retrató a la población usuaria por género y edad, disciplina deportiva y/o actividades de acondicionamiento físico.
Aunado a ello, para Fundación Marisa también fue importante percibir la demanda en los hogares del AMG, sus condiciones de acceso, frecuencia de práctica, principales motivaciones y obstáculos para realizar alguna actividad deportiva.
Este diagnóstico fue presentado el pasado 17 de agosto, por Yasodhara Silva Medina, integrante de Demoscópica México en el Auditorio de la Biblioteca Pública del estado Juan José Arreola; ahí la especialista explicó que la metodología que utilizaron se centró en cuatro etapas: 1) la investigación documental, 2) estudio cualitativo, 3) un estudio cuantitativo y 4) la integración de indicadores de línea base.
En el estudio, reconocieron tres principales factores que afectan principalmente a las mujeres al momento de decidir si quieren o no formar parte del ecosistema deportivo.
La primera son los factores sociales, donde observaron que el apoyo y reconocimiento de logros por parte de la familia y pareja es respecto a la maternidad. Asimismo, en la visibilidad mediática detectaron una autocensura vinculada con la aprobación social de deportes para cada género.
Por otra parte, están los factores escolares, ahí fueron: esenciales las clases de educación física de calidad, un alto nivel de escolaridad de los padres, una adecuada distribución de tiempo y esfuerzo entre familia, éxito laboral y deporte.
Finalmente, los factores institucionales, ahí el estudio arrojó que lo relevante que son los apoyos económicos, el reconocimiento al desempeño desde edades tempranas, los espacios y oportunidades profesionales e instituciones con agendas con perspectiva de género.
Cada una de estas contribuye a que una mujer pueda o no dedicarse al deporte, puesto que, por ejemplo, si cuentan con el apoyo de su familia, pero no cuentan con espacios de calidad en sus escuelas o en su comunidad, se verá dificultado su desarrollo en la disciplina.
Otro hallazgo, fue la detección de tres brechas importantes en el Área Metropolitana, las cuales son dentro de la práctica deportiva, en la ocupación laboral deportiva y en los cargos directivos de las instituciones deportivas.
En relación con la práctica deportiva, la brecha de género es de 50.3%, en donde un 66.8% de las personas que practican algún tipo de actividad deportiva son hombres y sólo el 33.2% son mujeres.
Entre los deportes que más practican hombres y mujeres en el AMG, el estudio encontró lo siguiente:
Dentro de la ocupación laboral del ámbito, la brecha es del 48.1%, ya que el 60.67% hombres trabajan como entrenadores en espacios públicos y privados del AMG, y sólo hay un total de 39.33% mujeres que trabajan como entrenadoras en los mismos espacios.
Y en la composición de los cargos directivos de las dependencias públicas del deporte es del 50.1%, pues el 66.7% de las personas que ocupan puestos directivos de las dependencias municipales del deporte son hombres, y las mujeres ocupan únicamente ocupan el 33.3% de estos puestos.
En esta última área, notaron recurrencia a nombramientos informales e inciertos. Es decir, las mujeres ocupan un alto número de cargos “no específicos”. Observando que no existe un reconocimiento oficial de las labores asignadas y a la par, funciones menos remuneradas.
Yasodhara Silva Medina señaló que en materia de género el deporte representa un medio para desafiar estereotipos y prejuicios, promover liderazgos femeninos y empoderar a las mujeres con miras a alcanzar la igualdad entre géneros.
Sin embargo, estas brechas de género terminan repercutiendo en las condiciones para ejercer derechos, oportunidades y construir autonomías.
“El deporte como una herramienta para la construcción de la paz”
Después de terminar la presentación del diagnóstico, se llevó a cabo un panel para dialogar posibles áreas de oportunidad para las mujeres y proponer algunas rutas estratégicas de intervención a las brechas de género en el deporte.
Leina Ruvalcaba, deportista mexicana especializada en judo adaptado, compartió que las mujeres en el deporte no solamente deben de estar por los beneficios físicos, sino también por el empoderamiento que representa de forma emocional y social.
Érika Loyo, jefa de la Unidad para la Igualdad en la Universidad de Guadalajara, comentó que las principales “barreras” que deberían de eliminarse son las institucionales, puesto que si se siguen perpetuando este tipo de desigualdades a nivel estructural en este y cualquier otro ámbito: “nada va a cambiar”.
Para Marisa Lazo, fundadora de Marisa, es clave dejar de ver a las mujeres solamente como “cuidadoras”, puesto que si esto no sucede será más difícil tomar estos espacios que dentro y fuera del deporte:
“…somos buenas mujeres cuando dedicamos el tiempo a los demás, entre más tiempo dediquemos, mejor somos. Y cuesta mucho trabajo dejar esos roles que han construido, y pelear contra estas”.
Por su parte, Paola Lazo, titular de la Secretaria de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres del Gobierno de Jalisco, puntualizó que “aún queda mucho camino por recorrer”.
No obstante, expresó que los resultados pueden servir como base para la creación de políticas públicas que impulsen la inserción y el apoyo de las niñas, adolescentes y mujeres en el mundo deportivo: “podemos ser parte de construir espacios más equitativos” complementó Paola Lazo.
En esto concordó Jessica Brito, directora del Centro de Educación Física y Salud Integral ITESO, quien considera que la clave es la unión entre las autoridades gubernamentales, la iniciativa privada y la educación, donde cada eje apoye desde distintas vertientes.
Frente al contexto y tomando como base los resultados del diagnóstico, la la Fundación Marisa propuso las siguientes líneas de acción para intervenir:
- Mayor participación de niñas, adolescentes y mujeres en deportes en general y particularmente en aquellos con menor presencia femenina debido a estereotipos.
- Procuración de patrocinios empresariales para deportistas y equipos femeniles.
- Campañas de comunicación que promuevan la participación de niñas, adolescentes y mujeres en áreas deportivas en las que persisten estereotipos masculinos.
- Incentivación de mujeres líderes en campos del sector empresarial, político, activismo social para que asistan y difundan su participación en eventos deportivos masivos.
- Promoción y apoyo para la formación de perfiles de mujeres con una trayectoria deportiva y experiencia en la implementación de la perspectiva de género dentro de los sectores público, privado y social vinculados al deporte y la activación física.
- Mayor presencia de mujeres en cargos de decisión en materia deportiva y de activación física.
- Socialización y búsqueda de alianzas para la implementación de la agenda de género en el ámbito deportivo local y la adopción de indicadores para su monitoreo y seguimiento.
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Aquí puedes conocer la campaña #HazDeporteComoNiña que realizamos en conjunto con Fundación Marisa: