MAROMA
Por Noelia Casella, Ana Lucía Ghiotti y Anabela Kern / Niñas y Niños Investigadores
Escritorxs invitadxs en Maroma
Niñas y niños investigadores es una experiencia de conocimiento desde un enfoque protagónico y multiespecie, pensando junto con Alfageme, Cantos y Martínez y Haraway entre otrxs. Se encuadra en un proyecto de extensión de la Universidad Nacional de Villa María, Córdoba, Argentina; organizado por docentes, investigadorxs, graduadxs y estudiantes, de los Institutos Académicos Pedagógicos de Ciencias Sociales y de Ciencias Humanas, de la misma universidad.
Buscamos producir experiencias de conocimiento e investigación científica con niñxs de entre 3 y 15 años, lo cual nos implica una dinámica de pensar estratégicamente la división para las actividades, atendiendo a las necesidades y potencialidades de cada edad. Las actividades se iniciaron en el mes de agosto del año 2021. Se llevan adelante los días sábados, cada 15 días dividimos la jornada en el momento de actividad, juegos y merienda, aunque también hay jornadas que son de fiesta o muestras. Actualmente, participan activamente más de 40 niñxs de diferentes grupos familiares.
Las actividades se contextualizan en el barrio popular Ex Matadero el cual se encuentra en el periurbano de la ciudad de Villa Nueva (se encuentra separada de la ciudad de Villa María por el río Ctalamochita) y está habitado por unas treinta y cinco familias en la actualidad y surge de una toma de tierras, la cual se presenta como un proceso que se desarrolló a lo largo de varios años y de manera espontánea. El barrio toma ese nombre ya que hace algunas décadas funcionaba allí mismo un matadero municipal.
En cuanto al conocimiento se busca fortalecer los aprendizajes y las capacidades cognitivas, artísticas y expresivas de lxs niñxs por fuera del espacio escolar, con el objetivo de co-construir saberes. Buscamos articulación con diferentes actores sociales, en relación con el Territorio-Universidad-Estado, para generar intervenciones territoriales sostenidas con niñxs y familias, para que este trabajo pueda orientar políticas públicas en el futuro con “perspectiva niñx”. En cuanto a lxs adultxs participantes se busca fortalecer las trayectorias de investigación.
Durante las actividades que realizamos en función de investigar con niñxs los registros de ellxs toman una función esencial, entre los formatos que se utilizan para este fin se encuentran cuadernos, fotos, notas de voz y videos. Por otro lado, los registros de lxs adultxs son de carácter etnográfico.
El trabajo de investigación se enmarca dentro de una praxis desde la educación popular, entendiendo la complejidad que se presenta en el campo y sosteniendo la intención y las estrategias para construir conocimientos en conjunto.
Lxs adultxs llevamos a cabo plenarios a modo de síntesis entre la praxis y la teoría, al mismo tiempo que los utilizamos para planificar y organizar las actividades. Si bien vamos con un esquema y un plan, siempre están sujetos a modificaciones según las demandas, emergentes y las interpelaciones infantiles.
A lo largo de los dos años que lleva el proyecto en marcha trabajamos con cartografías del barrio, se llevaron a cabo intervenciones temporales en el espacio y sostenemos el diálogo con los vecinxs.
Hemos hecho actividades que involucran un proceso de escritura creativa y colaborativa, tales como cuentos, historias, preguntas sobre el barrio, objetos que encontramos y juegos.
Los dibujos están presentes durante muchos encuentros, y utilizamos distintos materiales para crear (lápices, témperas, sellos), se realizaron encuestas lúdicas, entrevistas, bitácoras de flores y árboles en base a la recolección de especies del barrio. Se llevó adelante un censo de animales en el cual usamos encuestas, fotografías y grillas para tabular los datos. Se trabajó con microorganismos en el marco de una jornada de laboratorio en la UNVM.
En cuanto a las actividades más recientes podemos mencionar el trabajo con materialidades del barrio, que constó de la recolección de objetos hallados en los sectores que circundan la canchita, el registro de estos y la exploración.
El proyecto cuenta con redes sociales (Instagram y Facebook) con lo cual también se trabaja en la producción de contenido audiovisual, por parte de lxs niñxs y adultxs.
En este proyecto, consideramos que lxs niñxs son agentes de conocimiento en tanto construyen también ideas, preguntas, respuestas, problemas en torno al barrio, al mundo, la ciencia, la ciudad y el universo. Buscamos definir tanto a los adultxs y a los niñxs como investigadores, dejando de lado la identificación de “seños y profes”, para construir otro vínculo fuera de lo escolar. En este sentido, postulamos que es fundamental comenzar a descentrar- sin descartar- los procesos de investigación de los espacios académicos más tradicionales para dar lugar a formas más creativas y participativas.
Lxs niñxs del Ex- Matadero se interesan por conocer el mundo propio, el más cercano que contiene a humanos, plantas y animales. Participan de las tareas de cuidado con sus hermanxs, escriben cuentos e imaginan personajes, buscan microorganismos y los ven en un laboratorio, riegan plantitas y observan insectos. Lxs niñxs consideran dos espacios como significativos en el barrio (entre muchos): por un lado, lo que denominamos como “canchita”, esto es, un espacio al aire libre que funciona como punto de encuentro para nuestras actividades y también para jugar al fútbol como otra actividad que concentra gente y, por otro lado, la “garita” que es un parada de colectivos (como le decimos acá a los buses), pero que está abandonada y en espera del servicio del transporte público, lo cual es una gran ausencia ya que el barrio se encuentra bastante desconectado del resto de la ciudad, sobre todo para asistir a las escuelas que es el trayecto más frecuente que realizan las familias de manera cotidiana. Esta es una de las desigualdades que atraviesan lxs vecinos hoy en día, sumado a la falta de iluminación y otros servicios básicos.
Como proyecto de Extensión además de las tareas relacionadas con la investigación y el trabajo propiamente dicho, también nos interesa poder generar lazos con el Estado municipal para dar cuenta de las demandas, sentires, necesidades y deseos de lxs niñxs, pero en parte también de lxs adultxs del barrio. De todas maneras, damos cuenta con lxs vecinxs de nuestras limitaciones y de las intencionalidades y objetivos como grupo.
Como equipo de trabajo, lxs investigadorxs adultxs nos preguntamos acerca de los cómo, los para qué y los cuándo de la participación, teniendo siempre en claro que son procesos no lineales y en ese sentido están cargados de idas y vueltas ya que también estamos en un recorrido de producción de datos con niñxs lo que tiene sus propias complejidades en este espacio en particular y, sumado a ello, las dificultades (que a veces se transforman en oportunidades de creatividad) dado que la realización de las actividades al aire libre, sin ningún tipo de mobiliario suele ser un limitante. Por otro lado, pero de manera paralela a la investigación también nos encontramos en una reflexión constante acerca de cómo intervenir en los conflictos familiares, vecinales, entre lxs niñxs; analizamos también nuestras maneras de realizar transferencias en el territorio y cómo articular con agentes del Estado municipal.
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