Cerca de treinta infancias y adolescencias que habitan la colonia Cerro del Cuatro en Tlaquepaque, formaron parte de Urdimbre, un proyecto de acompañamiento a través del arte, el tejido y otras formas de expresión, para el abordaje de los derechos sexuales y reproductivos, además de la menstruación digna.
La artista visual y gestora cultural, Karina Casillas fue la creadora de la propuesta y la encargada de llevarla a cabo, a través del financiamiento del Programa de Estímulo a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA) Jalisco, durante los últimos siete meses.
Por Leslie Zepeda / @lesszep2
Urdimbre significa “conjunto de hilos que se colocan en el telar paralelamente unos a otros para formar una tela”. Bajo esta idea surge el proyecto textil con el mismo nombre, que evoca, por un lado, un término del bordado y, por el otro, la unión, el trabajo en colectividad, la organización y la autogestión vecinal de la comunidad del Cerro del Cuatro en el municipio de Tlaquepaque, Jalisco.
“Yo tengo aproximadamente tres años haciendo trabajo textil, empecé con el bordado y ya fui llevándolo, por eso el nombre de urdimbre, que es el punto exacto donde los hilos se encuentran cuando se forma una tela, los que van en vertical y horizontal se encuentran. Me parece muy lindo el entrelazado que hay entre el diseño de la pieza, la escucha, las necesidades, el punto de encuentro que para mí es mi quehacer artístico. Es el encuentro en la comunidad, lo colectivo” explica la artista visual y gestora cultura, Karina Casillas.
El proyecto fue dirigido especialmente a infancias y adolescencias, aunque durante su desarrollo se unieron un grupo de mujeres que recibieron uno de los talleres. Los temas centrales fueron los derechos sexuales y reproductivos, así como la menstruación digna. La artista visual detrás de este trabajo, Karina Casillas, resultó beneficiada del Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA) de la Secretaría de Cultura de Jalisco en 2022.
Según explica Karina Casillas, este proyecto se desarrolló mediante diferentes expresiones artísticas, con la intención de generar diferentes piezas que involucraran a las y los asistentes, niñas, niños, adolescentes y mujeres a la par de llevar procesos formativos. Por ejemplo, uno de los trabajos donde participaron mujeres de la colonia, implicó que cada una de las participantes elaborara una toalla de tela para la gestión menstrual, esta actividad, además, estuvo acompañada de una charla informativa al respecto.
Durante los talleres, se bordó colectivamente con las y los participantes un calendario menstrual, el cual sirvió para trabajar con las y los adolescentes, quienes produjeron una pieza de fotobordado. Se elaboró también un collage textil sobre las partes del cuerpo, cuya intención era destacar el cuidado y los límites para prevenir o advertir situaciones de violencia sexual. También, intervinieron algunos espacios públicos con maya, hilos, telas y telas teñidas:
“Hemos abordado temas sobre el respeto hacia el cuerpo, sobre el cuidado del cuerpo, la relación con otros cuerpos, que es muy importante mencionar en estas etapas donde los niños y las niñas empiezan a relacionarse con otros en la escuela, en la calle, en la casa Es un encuentro con lo que ellos también tienen qué decir, porque es fundamental escucharles. El pretexto son las obras textiles que sobre todo buscan expresar y reflejar lo que sucede en nuestras cabezas, nuestros cuerpos y en nuestras comunidades”, cuenta Karina Casillas.
“Urdimbre” inició en octubre de 2022 y culminó recientemente en mayo de este año con la participación de aproximadamente treinta infancias y adolescencias de la colonia Cerro del Cuatro. En este espacio la artista Karina Casillas narra que encontró una organización en la comunidad de la que pudo aprender nuevamente, ya que no es la primera vez que realiza acciones de incidencia artística en esta comunidad.
“Algo que siempre he aprendido de esta comunidad del Cerro del Cuatro es la autogestión y la organización que tienen, para mí eso es muy importante, la forma en que se organizan, la forma en la que gestionan los recursos es algo que se genera desde lo colectivo. Cada comunidad tiene su propio lenguaje y sus propias formas. La aceptación creo que fue bastante buena, porque los temas siempre supimos llevarlos de la mejor forma, me parece que nadie se sintió incómoda, siempre estuvo el manejo como de la información de manera muy respetuosa”, reconoce Karina Casillas.
Karina Casillas destaca que, como artista visual, fue valioso darse cuenta que estos temas ya eran importantes para la comunidad, es decir, que lo que hacía falta era contar con las herramientas, en este caso artísticas, para abordarlos y desarrollarlos, ya que el diálogo ya estaba abierto entre las personas de la comunidad. Las mujeres participantes del taller, así como las madres de las infancias que asistieron a las actividades, compartieron lo útil que fue reflexionar sobre la menstruación digna frente a los estigmas que, a través del tiempo, han sido impuestos por la sociedad y dentro de las familias.
Reconociendo el impacto que tuvo esta iniciativa, la artista visual externa lo importante que fue contar con el apoyo económico de PECDA para el desarrollo del proyecto “para mí fue muy gratificante tener este apoyo de la Secretaría de Cultura que como artista te deja un buen sabor de boca saber que tu trabajo puede ser apoyado, impulsado”.
“Generar desde lo colectivo y que la técnica pase a un segundo plano, me parece que es como un reflejo muy importante de lo que el arte hace con la sociedad o lo que debería hacer: escuchar para entonces generar” concluye Karina Casillas, quien espera compartir próximamente el material de las piezas trabajadas con la autorización de la comunidad.