El Festival de Cine Joven de Guadalajara “No somos de cristal” concluyó de manera exitosa; la directora y coordinadora de producción, Katia Ruíz, nos cuenta el por qué este festival abre las puertas a las y los jóvenes cineastas.
Por Josué Ibarra / @josueibarrasala
Fotos: Festival de Cine Joven de Guadalajara “No somos de cristal”
“Vivimos tres días donde pudimos apreciar las propuestas cinematográficas de la nueva generación de cineastas mexicanos”, esto para Katia Ruiz marca un antes y un después en los espacios destinados para las y los jóvenes dentro de la escena cinematográfica local y nacional.
El Festival de Cine Joven de Guadalajara “No somos de cristal”, organizado por estudiantes del Tecnológico de Monterrey, Campus Guadalajara, se realizó del 19 al 21 de abril. Su realización, a decir de la también coordinadora de producción, fue muy grata:
“Pudimos vivir y sentir de cerca la gran pasión que traen las nuevas generaciones dentro del ámbito del cine. Sin duda son personas que desbordan ganas, carácter y esfuerzo para consolidar proyectos como los mostrados dentro de la selección oficial. Se nota que la juventud trae muy buenas propuestas para la industria y un potencial gigantesco; por ello, para nosotros fue un honor que estos jóvenes creyeran en el Festival”.
Otro punto clave en el desarrollo fue la respuesta del público; sobre ello, Katia nos compartió cómo fue la respuesta:
“Obtuvimos una respuesta bastante positiva, pues recibimos muchos comentarios sobre lo impresionados que se sentían, tanto realizadores como público, del Festival en general. Tuvimos un aforo bastante bueno en todas las proyecciones y actividades paralelas”.
El éxito del Festival, considera, también se debió a que lograron darle a las y los cineastas de la ciudad: “Un espacio para ver y escuchar lo que las nuevas generaciones tienen que decir”.
El equipo que organizó y produjo “No somos de cristal” tiene pensado volver a realizar el Festival en 2024, aunque para confirmarlo se requieren muchos apoyos.
“Nos encantaría hacer el festival año con año. No puedo prometer nada ya que aún estamos en charlas para llevarlo a cabo anualmente. Sin embargo, sí puedo decir que nos parece importante que sigan existiendo y persistiendo espacios donde los jóvenes puedan compartir sus obras y los mensajes que tienen que decir”.
Y la necesidad de hacerlo, precisa, tiene que ver con lo que las y los participantes les manifestaron:
“Nos dimos cuenta del impacto que tuvimos con estos jóvenes cineastas y lo importante que fue para ellos la existencia de un espacio como No somos de cristal. Esperamos que el festival se pueda llevar a cabo anualmente para no dejar de dar voz a la nueva generación de cineastas mexicanos”.
Lo que diferenció a este Festival de Cine Joven fue el enfoque que tomó, ya que su objetivo fue impulsar a todas las juventudes mexicanas que se dedican a realizar contenido audiovisual, abriéndoles las puertas para que pudieran mostrar su arte y, así, llegar a ojos de otras y otros aficionados del séptimo arte.
En la premiación de esta primera edición las y los ganadores cortometrajes ganadores fueron:
- Categoría de ficción: “Spuria” del director Luis Robledo; los cortometrajes con mención honorífica fueron: “La Falda” de Ana Luisa Guzmán y “Claroscuro” de Marifer Damián.
- Categoría de documental: el cortometraje ganador fue “Rótulos: Los títulos de la calle” del director Ferenc Atic Vargas, el cuál también se llevó los premios a Mejor Guión y Mejor Dirección; dentro de esta misma categoría los cortometrajes que tuvieron mención honorífica fueron “Entre voluntad y madera de Enrique González y “Está serena luz de la mañana” de Emmanuel Tovar G.
- Categoría de animación: El ganador fue “El alpinista” de la directora Karla Grijalva; los cortometrajes con mención honorífica fueron: “El reencuentro” de Antonio Segura y “No anunciar” de Sofía Lupercio y Roberto Castañeda.
- Categoría experimental: el cortometraje ganador fue “El canal que cayó del cielo” del director Alejandro González Sánchez, cortometraje que también se llevó el premio a Mejor Cinematografía; los cortometrajes que tuvieron mención honorífica fueron: “Puertas” de Rodrigo López Carranza y “¿Dónde están mis papás?” de Ale Sánchez Trejo.
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Los cortometrajes ganadores pueden ser visualizados por medio de la plataforma FilminLatino.
