¡Lucha interminable!

Escribiéndonos Resistimos

Por Dariana Barrios y Janeth Valdes

El día 25 de noviembre fue un día para la levantar la voz contra toda la violencia, sea daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico, hacia todas nosotras como mujeres; un día donde toda mujer, sin importar país, condición, religión o economía, y sin distinción, puede alza la voz en contra de todas las infamias causadas a nosotras.

Lamentablemente, para tener este día de lucha y resistencia sin temor se tuvo que dar una trágica lección: el 25 de noviembre de 1960, en un acto de cobardía y machismo, las hermanas Mirabal, tres hermanas nacidas en República Dominicana, fueron asesinadas por Rafael Leónidas Trujillo (expresidente de aquel país).

Se cobraron tres vidas de mujeres que lo único que hicieron fue unirse a un movimiento en contra del régimen asfixiante de Trujillo;eran mujeres excepcionalmente inteligentes que levantaron la voz y fueron vistas como un obstáculo contra el régimen Trujillista.

Ellas fueron apaleadas y ahorcadas, para luego lanzarlas a un precipicio diciendo que fue un accidente de auto. Pero su muerte no fue en vano, el 25 de noviembre de 1993 la ONU aprobó esta fecha para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Es por eso que desde nuestra resistencia cotidiana queremos hacer un llamado a todas y todes para hacernos escuchar, para así poder erradicar estos actos de cobardía e ignorancia que se han cometido a lo largo del tiempo en contra de la mujer.

Es muy decepcionante saber que incluso en nuestros tiempos, con la sociedad en constante cambio, proyectando el mejoramiento de la inclusión y labrando un nuevo futuro, se sigan cometiendo este tipo de atrocidades contra la mujer sin ningún tipo de arrepentimiento, llenos de frialdad y sin sentimientos.

De esta manera nos entristece ver que tanto una pequeña niña como una mujer  corren los mismos riesgos por el simple hecho de ser mujeres.

La gravedad de la situación en la que hemos vivido y vivimos es alarmante: una mujer, niña o morra no puede salir a la calle sola porque automáticamente se convierte en el punto perfecto para todas las atrocidades que se comenten en contra de su integridad.

Es por eso y mucho más que este día gritamos, resistimos y luchamos, haciendo retumbar los muros que ya no nos pueden callar.

Esta es una lucha que peleamos no solo este día, sino constantemente, protestando de todas las maneras posibles: marchando, escribiendo o con el simple hecho de no callarnos más.

Por todas las heroínas que antes alzaron la voz por nosotras, estamos forjando un futuro en donde ser mujer sea sinónimo de valentía, igualdad, fuerza, capacidad y no de miedo, peligro y silencio.

Comparte

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Quizás también te interese leer