#FIL2022
¿Cómo definimos lo queer?, ¿qué historias contamos en la comunidad LGBTIQ+? y ¿qué impacto tienen estos productos en la misma? fueron algunas preguntas que se realizaron en el panel “Literatura Queer y autonarrativa: cómo contar” en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
Por Aletse Torres / @aletse1799
La literatura queer toca temas relacionados con la identidad de género, orientación sexual, expresión de género o todo lo relacionado con la comunidad LGBTIQ+. No obstante, esta no es una definición inamovible, pues en palabras del escritor Christopher DiRaddo, es difícil encontrar un concepto que englobe todo lo que implica ser queer.
En ello concordo, Adel B. Khelifa quien señaló que queer es un concepto paraguas para la comunidad LGBTIQ+, pero que, a su vez, implica dar cuenta de toda una diversidad que ni ellos pueden pensar y/o enlistar:
“El concepto de queer ha cambiado con el tiempo, lo que para mi es queer a lo mejor para otra generación no, no podemos tratar de encerrar y limitar esta área en un par de cosas solamente”, señaló el autor de “Le tour de la question”.
Ambos autores formaron parte del panel “Literatura Queer y autonarrativa: cómo contar” que se realizó este 28 de noviembre en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.
Ambos creadores compartieron cómo han elegido contar sus historias a través de la literatura, cruzando temas de una identidad múltiple que va más allá de una sola característica, esto para conmover, emocionar, retener y alcanzar lo universal, tal y como lo encontrarán en sus obras The family way (Christopher DiRaddo) y Le tour de la question (Adel B. Khelifa).
Por ejemplo, en esta última obra, el autor crea una historia de un joven que se encuentra en una dualidad con su identidad, ya que nació en Montreal, pero tiene ascendencia argelina. Esta dualidad y conflicto se cuentan a través de recuerdos (propios y ficticios) que se hallan inmersos en una dinámica familiar entre dos culturas donde no resulta fácil mantener el secreto que el protagonista creyó que no contaría: su orientación sexual.
Por su parte, DiRaddo narra en las páginas de “The family way”, la historia de un hombre gay que donará su esperma a sus amigas lesbianas, con lo que de alguna forma comenzará una familia, aquella que no había encontrado en ningún lado.
Para DiRaddo es importante exponer cómo son las personas de la comunidad LGBTIQ+, hablar de cómo su vida funciona de forma diferente, pues deben de encontrar familia en otros espacios; así mismo considera importante hablar del tiempo en que tardan en tener aquello que es “normal” para otros como el primer amor.
Ambas obras presentadas en la FIL sitúan una encrucijada entre lo privado y lo político no sólo por sus temáticas, sino por el tratamiento literario que se da al material autobiográfico, el uso de la narración en primera persona y el afán por traer a la luz a lo oculto o mal entendido.
Es así, como ambos escritores muestran múltiples identidades que se complejizan cuando a la orientación sexual o identidad de género se le añaden un bagaje cultural, una experiencia personal de inmigración o una historia familiar.
Ninguno de los autores cree que existe “una fórmula” para contar historias en la literatura queer; no obstante, consideran importante que aquello que escriban o, en este caso, narran lo hagan desde lo que conocen y les apasiona.