“Si no reconocemos los discursos de odio, no podemos combatir la violencia digital”

#FIL2022

En el marco de la quinta edición “De Muro a Muro”, coloquio anual dentro de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, se llevó a cabo la mesa de diálogo “¿Cómo detener la violencia digital?”, la cual trató sobre la eliminación y prevención de los actos violentos que ocurren en el universo digital. 

Por Aletse Torres / @aletse1799

“Yo no quería sentir dolor, pero es inevitable que no duela y eso se convierta en un miedo constante en el mundo real” Julian Fuks, escritor.

En México, el 30.1% de las mujeres de 20 a 29 años de edad que utilizaron internet en 2021, fue víctima de violencia digital en los últimos 12 meses, frente al 25% de los hombres, esto conforme a registros del Módulo de Ciberacoso (MOCIBA).

La violencia digital son los actos de acoso, hostigamiento, amenazas, insultos, vulneración de datos e información privada,mensajes de odio, y difusión de contenido sexual sin consentimiento, a través de espacios sociodigitales. 

Frente a este panorama, surgió la mesa de diálogo “¿Cómo detener la violencia digital?”, con el propósito de reflexionar sobre las causas de la misma y, a su vez, proponer soluciones para enfrentar este tipo de agresiones, no sólo desde la perspectiva del género sino también en los ámbitos políticos, culturales y sociales en general. 

El foro que forma parte de la quinta edición “De Muro a Muro”, coloquio anual de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, se propuso debatir en este año debatir fenómenos ligados al género, a las violencias y a lo digital, tanto a nivel nacional como mundial. Y para hacerlo invitaron a las académicas Rasha Nagem y Sheri Bauman; así como al escritor Julian Fuks. La moderación estuvo a cargo de la periodista Gabriela Warkentin.

Sheri Bauman explicó que la violencia digital pasa por factores como: el poder, el sadismo  o narcisismo de lxs usuarios que “comienzan con las agresiones”. Asimismo, señaló que la falta de regulaciones por parte de las redes sociales y de legislación en los países funge como un puente para agredir a las personas a través de una pantalla. 

Bauman, recalcó que el anonimato le proporciona un tipo de “poder” a las personas, puesto que se atreven a hacer lo que lo harían en la presencialidad. Un ejemplo de ello, es cuando compartimos un tweet que ataca a otra persona, le damos “me gusta”, lo mismo hacemos con un meme que se burla de la apariencia de alguien o cuando compartimos un discurso lleno de odio en nuestro muro. 

“Se piensa que como no somos los actores principales de la acción, no ejercemos violencia, pero al compartir, dar like o hacer viral un discurso de odio somos parte de la violencia”, sentenció Bauman. 

Desde lo personal, Julian Fuks, compartió su historia como víctima de violencia digital. El escritor describió como una mañana decidió realizar una crónica sobre el día de la Independencia en Brasil, en el texto utiliza la palabra terrorista, pero explica que busca resignificar su significado en algunos párrafos de su trabajo. 

No obstante, esa palabra fue suficiente para nombrarlo un “terrorista” en las redes sociodigitales, llenar de odio su bandeja de mensajes en repetidas ocasiones y amenazar de muerte a él y a su familia. Esta situación, lo llenó de miedo y paranoia a Julian, pues al salir de casa pensaba que en cualquier momento una persona lo lastimara: 

“Intente pelear con ese miedo, no sentir nada, que no alimentará el odio, aunque él solo lo hacía. Pero no podía evitar sentir mucho miedo y tristeza”. 

Para Fuks, es primordial reconocer el dolor que causan las acciones en la digitalidad, puesto que al minimizarlas con frases como:“es solo un tweet” seguimos normalizando la violencia y permitiendo su existencia en todos los espacios. 

Por su parte, Rasha Nagem, manifestó que si no son reconocidos los “discursos de odio” y mucho menos sancionados, “jamás terminará la violencia”. Se debe de definir que es un discurso de odio, comprender cómo opera y cómo podemos erradicar aquellos que circulan en el mundo digital. 

Finalmente, propusieron algunas de las acciones que pueden ayudar a prevenir la violencia digital: 

1. 1. 1. Regulación estricta en las redes sociales. 
      2. Legislación en materia de violencia digital en todo el mundo. 
      3. Reportar acciones digitales que sean violentas, aunque estas no sean directamente hacia nosotrxs. 
      4. Ser conscientes de las prácticas que son violencias (pese a su normalización). 
      5. Reconocer a nivel social los discursos de odio. 
      6. No confundir la libertad de expresión, con discursos que violenten los derechos de otras personas. 
      7. Respetar los derechos de las demás personas. 

“Estas no son respuestas, mucho menos soluciones, pero sí son acciones que puedan llevar al cambio social” puntualizó Nagem.