Luego de una semana de sesiones concluyó el juicio por el feminicidio de Daniela Vargas, celebrado en su mayoría en la ciudad de Guadalajara, pero también en Puerto Vallarta, lugar donde fue asesinada el 17 de febrero de 2018. Tres jueces del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco dictaminaron 39 años y 11 meses de prisión contra David Israel “N”, quien fuera su pareja.
Tras más de cuatros años en la búsqueda de justicia, la defensa legal de la familia de Daniela buscó una reparación integral del daño, por lo que, las y los jueces también otorgaron en la sentencia el pago de 3 millones de pesos como parte del daño ocasionado a las víctimas indirectas como su familia, incluida la hija de ambos que al momento del asesinato tenía apenas 39 días de nacida. En caso de no ser cubierta por el responsable, tendrá que ser asumida también por la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas
Tanto David Israel “N”, pareja de Daniela, Noé de Jesús “N” y Diego Misael “N”, papá y primo del responsable, confesaron su participación en el crimen. El feminicida aceptó haber privado de la libertad a Daniela, así como asesinarla y posteriormente realizar la inhumación ilegal de su cuerpo, sin embargo, los cómplices recibieron una pena de poco más de cinco meses y tampoco podrán acercarse a la hija de Daniela mientras no sea mayor de edad.
Por Leslie Zepeda / @lesszep2
El juicio por el feminicidio de Daniela Vargas Ledezma en Las Juntas, delegación de Puerto Vallarta, transcurrió en una serie de sesiones que se prolongaron por poco más de una semana. En éste, la defensa legal de su familia buscó una reparación integral del daño, donde el resultado fueron 39 años y 11 meses de sentencia contra el feminicida, así como un pago de 3 millones de pesos ante los daños ocasionados a la misma.
No fue sencillo el resultado, pues desde julio de 2018 David Israel “N” pareja de Daniela, así como Diego Missael “N” y Noé de Jesús “N”, primo y padre del último, fueron vinculados a proceso por el delito de feminicidio y encarcelados en el Centro Integral de Justicia Regional Costa Norte de la Delegación Ixtapa de Puerto Vallarta, donde interpusieron distintos recursos legales y se presumían como inocentes.
Por ello, la defensa de Daniela desde ese momento tuvo que buscar las pruebas y testigos necesarios para demostrar que ellos mentían.
El cuerpo de Daniela Vargas Ledezma fue encontrado sin vida y con signos de violencia en la misma delegación donde ella vivía con su hija de 39 días de nacida y su pareja, David Israel “N”, ahora reconocido como su feminicida.
Luego de cuatro años de los eventos, finalmente el pasado martes 13 de septiembre obtuvieron una sentencia condenatoria los responsables, así lo informó Sandra Quiñones, defensora legal de la familia de Daniela, así como activista feminista de Comité de Latinoamérica y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM Jalisco):
“A la pareja de Daniela se le impuso una pena de 39 años y 11 meses, pagar una reparación del daño de tres millones de pesos, sujetándolo a que tiene que dejar una fianza ante el juez de ejecución dentro de los 90 días siguientes. Se le quitó la patria potestad, los derechos de custodia sobre la menor y se le condenó a una multa que tiene que pagar al erario estatal”.
Antonio Torres, abogado y también parte del equipo jurídico dio a conocer que se optó realizar un juicio abreviado dado que los responsables del feminicidio confesaron su actuar en el mismo. Por un lado, David Israel “N” aceptó ser el autor material del feminicidio de Daniela Vargas Ledezma, por lo que fue acusado de haberla privado de su libertad, asesinarla y posteriormente realizar la inhumación ilegal de su cuerpo.
Sandra Quiñonez y Antonio Torres, defensa legal de la familia Vargas Ledezma. Rueda de prensa tras sentencia al feminicida de Daniela Vargas.
Por otro lado, Diego Missael “N” y Noé de Jesús “N”, primo y padre del feminicida, también confesaron su participación, donde declararon no haber participado en el asesinato, por lo que fueron acusados únicamente por secuestro y participación en la inhumación, con lo que obtuvieron una sentencia de poco más de 5 meses, ambos fueron puestos en libertad, ya que habrían ingresado a prisión desde julio de 2018.
“A Noe y Misael los delitos de los que terminaron siendo responsables, de acuerdo a su participación en el feminicidio, la condena fue de 5 meses, 14 días, 16 horas y 48 minutos, por lo tanto, ya estaba saldada la pena. También, en el tema de reparación del daño, cada uno pagó la cantidad de 5 mil pesos a la víctima infante, hija de Daniela, cantidad que para el momento de realizarse la audiencia ellos ya habían hecho los depósitos correspondientes”, detalló la abogada Sandra Quiñones.
Asimismo, según resaltaron la abogada y el abogado, los tres jueces encargados del caso del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco cuidaron que tanto la celebración del juicio como la resolución se llevaba con perspectiva de género y de derechos humanos, por lo que, en la reparación del daño, incluyeron también la protección de las víctimas indirectas: su familia e hija.
Dado lo anterior, tanto el abuelo como el tío de la menor se les prohibió acercarse y convivir de cualquier forma con ella, ya que tienen toda restricción legal hacia la infante por un tema del interés superior del menor, esto hasta que la niña cumpla la mayoría de edad.
La defensora Sandra Quiñones reconoció la labor de los jueces responsables del caso dado que cuidaron a detalle las acciones a tomar en el juicio. Sobre todo, porque los jueces marcaron un precedente, que a su vez representa una responsabilidad para los siguientes juicios sobre feminicidios que se lleven a cabo en Jalisco.
Incluso, Quiñones expuso que por primera vez en años de experiencia vio a tres jueces preocupados por la protección a las víctimas, porque los tres millones de pesos considerados como reparación del daño no sólo lo sujetaron a la fianza del imputado, sino también a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas para que en caso de que no se cubra, sea ésta quien lo haga, situación que, recalcó no se había hecho antes.
“El caso de Daniela en esta sentencia está dejando muchos precedentes realmente para todos aquellos feminicidios que están en proceso de llevarse ante un juzgado, eso a mí me deja un muy buen sabor de boca, de ver que el poder judicial de alguna manera empieza a entender que el tema de la justicia en los feminicidios sí se tiene qué ver desde otra óptica, sí se tiene que revisar desde otros parámetros, y sobre todo que aunque un feminicidio implica una muerte, hay víctimas vivas que se tienen que cuidar y que muchas veces los jueces las vuelven a revictimizar”, insistió la abogada.
Mil 676 días en la búsqueda de justicia por el feminicidio de su hija
En México los feminicidios ni siquiera son investigados como tal, o al menos no todos, ya que según información de la asociación civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad identificaron que durante 2021 se cometieron 3 mil 712 asesinatos a mujeres. De este total, 2 mil 746 fueron registradas como víctimas de homicidio doloso, es decir el 74% y solamente 966 de ellos como feminicidio, apenas el 26%.
Lo anterior significa que el caso de Daniela Vargas Ledezma formó parte de la minoría, ya que solamente 1 de cada 5 muertes violentas de mujeres en México son consignadas e investigadas como feminicidio, según los datos de la organización.
Silvia Ledezma, madre de Daniela Vargas Ledezma.
Silvia Ledezma madre de Daniela y su familia resistieron mil 676 días la inclemencia de distintas autoridades de Jalisco que, en su inacción, mantuvieron la incertidumbre de saber si habría una sentencia para su feminicida. Una situación que no estaban dispuestos a permitir como lo mostraron en al menos tres manifestaciones que convocaron en Puerto Vallarta.
Así, la familia de Daniela expuso mediante un comunicado el día en que se dio a conocer el dictamen de los jueces contra David Israel “N” que no habrá pena que pueda devolverles la vida de su hija:
Como familia manifestamos que no existe sentencia ni acciones reparatorias que nos regresen a Dani; sin embargo, ahora conocemos la verdad acerca de lo sucedido en febrero de 2018 Además, para nosotros como familia es importante velar por el interés superior de la pequeña hija de Daniela y su no revictimización.
Silvia y su familia también reconocieron la labor de acompañamiento que recibieron por parte de las organizaciones:
Igualmente les compartimos que desde el Colectivo de Familias Unidas contra los Feminicidios seguiremos acompañando, articulándonos y acuerpándonos, con el único fin de alcanzar: Justicia, verdad y memoria para todas las víctimas directas e indirectas de feminicidio.
Manifestación en Puerto Vallarta para exigir justicia por el feminicidio de Daniela Vargas Ledezma. Fotografía Leslie Zepeda.
Sandra Quiñones, activista, defensora legal y compañera de Silvia Ledezma destacó el resultado positivo en la resolución dictada por los tres jueces el martes 13 de septiembre, sin embargo, también reitera lo cansado que fue para ella y su familia este camino de más de cuatro años en la búsqueda del acceso a la justicia, donde identificó que, además de los años de cárcel para el responsable, hay parte del proceso que también es reparador para ellas y ellos:
“Sé que terminaron cansados porque al final de cuentas era el juicio de su hija e implicaba escuchar las declaraciones del responsable, verlo, es simple hecho de verlos veía como se estresaban, pero sí vi cuando reconocen la responsabilidad de cada uno, su participación. Noté la expresión sobre todo de Silvia, como de “se acabó” eso creo que como abogada le deja ese sabor de boca, de entonces esto es lo que tenemos que buscar los abogados para las familias, ese sentimiento de por fin cerré esta parte y a continuar con mi vida”.
Dani tenía 24 años, estudiaba la carrera en Psicología, tenía una bebé de 39 días y como todas las víctimas de feminicidio, tenía una vida por delante que fue interrumpida en este caso por David Israel “N” quien, gracias a las leyes, esfuerzo y acompañamiento jurídico feminista, pero sobre todo a la lucha y resistencia de la familia de Dani, pasará casi 40 años en prisión, evitando que cometa más actos similares.