#AlianzaDeMedios
En los últimos cinco años, cientos de cadáveres de tortugas han sido arrastrados por la corriente marina hacia la orilla de las playas de Chiapas. No hay una respuesta clara sobre las causas de las muertes. La única certeza es que, cada año, el número de tortugas marinas muertas en estas playas va aumentando
Texto y fotos: Isabel Mateos / Pie de Página
PUERTO ARISTA, CHIAPAS.- Testimonios de lugareños reportan más de 300 cadáveres; algunos hablan hasta de 400. Los cuerpos sin vida de las tortugas marinas, muchos localizados en estado de putrefacción, han sido enterrados en las últimas semanas en diferentes puntos de Puerto Arista.
Las imágenes confirman una tendencia de los últimos cinco años: en cada temporada, son encontradas decenas de cadáveres de tortugas que han sido arrastrados por la corriente marina hacia la orilla de las playas de Puerto Arista, Playa del Sol y Boca del Cielo. No se tiene una respuesta clara ni resultados de investigaciones sobre las causas de las muertes. La única certeza es que, año con año, más tortugas marinas mueren en la región.
La cantidad podría aumentar con la llegada de más tortugas para la época de anidación, en las costas chiapanecas, que comienza en julio y termina en enero.
De puerto a turismo
Tradicionalmente, Puerto Arista ha sido una región dedicada a la pesca. Como su nombre lo dice, la función del lugar era ser un puerto. Sin embargo, por las dificultades geográficas para albergar grandes buques, la región dio un giro en el siglo XX y se dedicó mayormente a ser un destino turístico. Visitado por población local dada su cercanía con la capital del estado, Tuxtla Gutiérrez.
El puerto tiene una extensión de 32 kilómetros de playa. Está ubicado a 195 kilómetros de distancia de la capital, por lo que es la playa más visitada del estado. Desde la orilla se pueden observar los picos de la Sierra Madre de Chiapas que forma parte de la región Istmo-Costa y colinda con las playas de Oaxaca, con una población de 958 habitantes, según el último registro del Instituto Nacional de Geografía e Informática.
Un santuario para seis de las siete especies de tortugas marinas
En el mundo existen siete especies de tortugas marinas: Verde, Lora, Golfina, Caguama, Carey del Pacífico, Laúd, y la Kikila, endémica de la plataforma continental de Australia.
Seis de ellas llegan a diferentes playas de México con el objetivo de anidar, regresando al mismo lugar en el que ellas nacieron pues este trayecto lo guardan en su memoria desde el día que se encaminaron al mar por primera vez.
A Puerto Arista llega, principalmente, la tortuga Golfina, y en menor cantidad la tortuga Carey y la tortuga Verde.
La tortuga Golfina es una de las especies que anida en las playas del pacífico chiapaneco y regularmente llega en grupos. El “Santuario Tortuguero” de Puerto Arista con sus más de 32 kilómetros de playa, recibe a miles de tortugas que, cada año, entre julio y enero, cavan su nido con sus aletas traseras, con forma de cántaro y una profundidad de 40 a 50 cm. Después de construirlo, las tortugas entran en una especie de trance mientras desovan los aproximadamente 100 huevos que esta especie pone en cada anidación. Eclosionarán 45 días después.
Estas seis especies de tortugas marinas que llegan a las costas mexicanas están protegidas por la norma NOM-059-SEMARNAT-2010 por estar en peligro de extinción. Aún así, es común, a pesar de la veda permanente de la especie desde 1990 y las leyes a favor de su conservación y protección, que, los pobladores de la región continúen comercializando sus huevos, considerados una comida exótica y afrodisíaca, a turistas nacionales e internacionales.
Por este motivo, el tipo de conservación de la especie en la zona es por medio de corrales de incubación. Personal del Campamento Tortuguero a cargo de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn) y Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conamp) retiran los huevos de los nidos y los colocan en un espacio para poder controlar y cuidar que nadie los robe y así no puedan comercializarlos, así también se previene que el siguiente grupo de tortugas golfinas anide sobre los otros nidos. Ahí en el corral, se cuentan los días de incubación y se da un seguimiento para la liberación de las nuevas tortugas para llevarlas a la orilla del mar y que inicien su camino.
De acuerdo al informe anual de la Conamp del 2021, se registró un total de 10 mil 462 nidos y se liberaron 478 mil 654 crías al mar en diferentes zonas de las costas del estado. Más del 80 por ciento de estas corresponden a la tortuga Golfina, un poco menos de tortuga Prieta y Carey. Por otro lado, detectaron poco menos de 2 mil 500 nidos saqueados, lo que correspondería a casi doscientos mil huevos, con el mayor registro de saqueos en Boca del Cielo.
El aumento de las muertes
Una noticia alarmante que se extendió en medios nacionales e internacionales entre el 18 y 25 de agosto fue el hallazgo de cientos de tortugas muertas en las playas de Chiapas. Se leía en las notas que 130, 150, hasta 330 tortugas habían sido encontradas muertas a la orilla del mar. Turistas y pobladores estaban alarmados.
Pero esta misma noticia se puede encontrar, coincidiendo en fechas, cada año, en diferentes medios y en comunicados de las instituciones federales o estatales. Desde el primer comunicado de la Conamp, en agosto de 2018, la cifra de mortandad ha aumentado.
Ese año, la Conamp alertó a la sociedad con el anuncio oficial de la muerte de más de cien tortugas encontradas a la orilla de las playas de Puerto Arista, Playa del Sol y Boca del Cielo. En ese mismo documento, confirmaba que otras dependencias federales (Semarnat, Profepa, Conapesca, Semahn), y otras del gobierno de Chiapas (ZooMat y Sepesca) investigaban las causas de la muerte pues existía la probabilidad de que fueran los diferentes artefactos de pesca utilizados en la región como redes, anzuelos, lanchas y demás herramientas que usan las cooperativas de pescadores. También se mencionaba que se realizarían necropsias para descartar contaminación en el alimento de las tortugas o la llamada “marea roja”.
Cinco años después y con un comunicado anual publicado entre el 18 y 25 de agosto, la Conamp continúa informando sobre el incremento de la mortandad de tortugas en la zona sin poder determinar la causa de la muerte. La coincidencia en fechas de las muertes se relaciona con la temporada de anidación, en la que miles de tortugas llegan a este Santuario Tortuguero para dejar a sus crías.
A su llegada a las playas se encuentran con la presencia humana y redes de pesca en las que se quedan atrapadas para morir ahogadas sin poder salir a tomar oxígeno por más tiempo del que aguantan sus pulmones, lanchas con motores con las cuales pueden golpearse y quedar heridas, basura proveniente de diferentes partes del mundo por las corrientes marinas y grandes luces de hoteles nuevos que las asustan y hacen que regresen y los huevos los tiren al mar.
Cuando se leen los comunicados, es posible confundirse de año por las similitudes que tienen, salvo por el aumento en el número de tortugas muertas: Entre el 24 de julio y 13 de agosto de 2018 se reportaron 113 ejemplares y en el comunicado publicado el 19 de agosto de 2022, se reportaron 250 tortugas muertas.
El comunicado de este año dice que las causas podrían ser los diferentes artefactos de pesca, casi lo mismo que el comunicado del 2018. Aun no sabemos la causa de la muerte, ni se han tomado acciones para que el siguiente año, esto no se repita.
Sin resultados de investigación, las tortugas siguen muriendo
Entre los comunicados de las instituciones federales y estatales y los medios de comunicación locales o internacionales, la información pasa de boca en boca sin respuestas claras.
De hecho, al leer estos comunicados año con año, parecería que las causas de muerte son investigadas como si fuera la primera vez.
Y las tortugas continúan muriendo cada año en las Playas de Puerto Arista.
Lejos del área más transitada de la playa donde se encuentran mayormente hoteles y restaurantes, el paisaje resulta postapocalíptico: lugares repletos de basura proveniente de lugares lejanos, arrastrada por corrientes marinas. Hay hieleras, zapatos, botellas de plástico, vidrio. Huellas de decenas de cuatrimotos enmarcan los cadáveres en la arena, mientras los zopilotes rodean cadáveres de tortugas para empezar el festín colectivo después de la tormenta. Metros después, siguen los huesos, cráneos y caparazones secos de tortugas que no tienen resuelta su muerte.