#HastaEncontrarlos
José Manuel Branbila Pérez, de 28 años, fue desaparecido el 26 de mayo de 2022 en la colonia Soto Park, en Zapopan, Jalisco, cuando salió a entregar en su motocicleta un pedido del mini súper en el que trabaja.
Su madre, Lucía, a la distancia le busca porque las autoridades de la Fiscalía del Estado de Jalisco, desde hace que presentó la denuncian por desaparición le aseguran que “están trabajando”, pero no le dan ningún avance que permita localizar a su hijo.
Por Darwin Franco / @DarwinFranco
El video de la cámara de seguridad donde José Manuel Branbila Pérez trabaja en la colonia Soto Park en Zapopan, Jalisco, lo muestra contestando el teléfono de un pedido. Eran, aproximadamente, 17:20 horas del 26 de mayo de 2022.
En esas últimas imágenes, a José se le ve tomando la mercancía, recibiendo de su jefe el cambio que deberá dar al “cliente nuevo” que marcó para solicitar cerveza; se le observa también bebiendo un refresco, todo esto antes de que salga por la puerta del negocio para subir a la motocicleta en la que entrega cotidianamente los pedidos.
Después de ahí, nada. No se tiene rastro de él, ni de la moto. Nada.
Su madre, Lucía, quien radica en Puerto Vallarta, se percató de la desaparición de su hijo cuando éste no devolvió la llamada que prometió hacer un día antes, también cuando los mensajes que le mandaban se quedan en sin ser recibidos. Pero lo que la alarmó más es cuando su teléfono celular comenzó a mandar directamente a buzón.
Cuando no se supo nada de él, marcaron a su trabajo y le preguntaron a su jefe si sabía dónde estaba. El jefe le contestó que su hijo tenía como dos días sin regresar al trabajo; incluso, les compartió que cuando vio que no regresaba salió a buscarlo y no tuvo suerte. También les confesó que marcó al número de ese supuesto cliente nuevo, pero tampoco tuvo suerte porque ese celular había sido apagado.
Al ver que José Manuel no regresó al trabajo, su jefe interpuso una demanda por el robo de la motocicleta; sin embargo, no se trataba de un robo sino de una desaparición.
Desde Puerto Vallarta, la familia Branbila Pérez viajó hasta Zapopan para saber qué había pasado y para presentar en la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas para poner una denuncia por la desaparición de José Manuel. Desde entonces han esperado alguna respuesta clara de la autoridad, pero esto no ha sucedido:
“Hasta ahora sólo me han comentado que están rastreando la última llamada de mi hijo, pero pues no hay nada. Nosotros somos los que hemos tenido que insistir para que se muevan, pero sólo nos dicen que están investigando”.
Lo que le preocupa a Lucía es que su hijo haya tenido algún tipo de represalias de las personas que meses antes lo sacaron por la fuerza -junto con otras personas- de un rancho por la zona de Tesistán, también en Zapopan.
“No sé si esto tenga relación, pero sabemos que antes de su desaparición se vio a unos hombres rondar la tienda donde trabaja mi hijo. Yo lo que quiero que se investigue si lo que le pasó antes tiene relación con su desaparición, y también saber quiénes son esos hombres que sólo miraban a la tienda dos días antes de lo que pasó”.
José Manuel tenía tiempo de haber superado un problema de adicciones y pese a que su familia vive en Puerto Vallarta, él decidió trabajar en Zapopan porque decías sentirse más cómodo acá.
Desde el incidente en el rancho, éste señaló a su familia que todo estaba bien, pero le preocupaban las cosas personales que no le dejaron sacar de aquella propiedad. Incluso, a su madre le contó que cuando tuvo que llevar un pedido a ese rancho, pidió a quienes ahora están en la propiedad que le devolvieran sus cosas.
La persona que estaba en la puerta le dijo que lo consultaría con sus patrones, pero le pidió un número. Después se supo que desde ese lugar marcaron a la tienda para decirle que: “No lo querían volver ahí, pues ya lo tenían identificado”
“A mí me gustaría que en la Fiscalía prestarán más atención a todo lo que le pasó a mi hijo antes, también que se ocuparán más en investigar, pues es fecha que no han ido a hablar con el señor de la tienda, ni han investigado más en la zona”, explicó Lucía.
A ella le parece que ya son muchos días sin que hagan su trabajo:
“Lo que me preocupa es que sigan pasando más días sin que investiguen quiénes tenían problemas con mi hijo, sin que investiguen lo que yo ya les dije”.
La exigencia de Lucía es que todo esto se investigué y que las autoridades le den información concreta y clara sobre la desaparición de su hijo, pues cada que marcan se da cuenta de que “no han hecho nada”, pues la respuesta de siempre es que “siguen investigando y que se comunicarán con ella cuando haya algo nuevo”.
José Manuel Branbila Pérez tiene 28 años, el día en que fue desaparecido vestía una camiseta blanca sin mangas, unas bermudas de color verde, tenis negros y lentes obscuros.