Por Christian Noe Cantero // @christiancantero // @chridtian_ch_malviviente
Este 19 de marzo, se cumplieron cuatro años de la desaparición forzada de Javier Salomón Aceves Gastélum, Marco Francisco García Ávalos y Jesús Daniel Díaz García, todos estudiantes de cine del CAAV.
En clara exigencia de justicia familiares, estudiantes, maestros, amigos y ciudadanos marcharon, en 2018, durante semanas para exigir la aparición con vida de los tres jóvenes. Tal fue su fuerza que, desde el 21 de marzo de ese año, se renombró a la Glorieta de los Niños Héroes como “La glorieta de las y los desaparecidos de Jalisco”.
Hoy este espacio se ha llenado de lonas y losetas de búsqueda, losetas que contiene los rostros de quienes aún no han sido localizados; ahí también existen dos acciones memoriales más una titulada: “El Jardín de la Memoria” dedicado a los tres estudiantes y a todas las personas desaparecidas, así como un macetón más en honor de las y los sobrevivientes del “halconazo tapatío”, ocurrido el 5 de junio de 2020.
Actualmente, la Glorieta de las y los desaparecidos de Jalisco es un punto de reunión para todas protestas que exigen justicia, pero sobre todo es un sitio de encuentro para las colectivas de madres buscadoras que buscan a las más de 15 mil personas desaparecidas en el estado.
Un jardín por la memoria
“El Jardín de la Memoria” se instaló el 19 de marzo de 2019, en el marco del primer aniversario de la desaparición forzada de Marco, Daniel y Salomón. Hoy a tres años,Selene Garza y Magdalena Macías, estudiantes del CAAV, se reunieron para limpiar la Glorieta y recordar que la búsqueda de sus compañeros no se ha detenido.
Selene Garza cursaba el sexto semestre de la carrera de Cine en CAAV cuando comenzaron a circular las fichas de búsqueda de sus compañeros entre sus contactos. Recuerda que todo alcanzó una connotación a nivel nacional:
“Nos dijeron que no lo encontraban, que estaban desaparecidos, y fue muy sorprendente, porque un día es entre tus compañeros y al día siguiente fue algo que vi en las noticias”.
Por su parte, Magdalena Macías dice que los maestros, tras este hecho, siempre les hablaron sobre la inseguridad. Ella entró a la carrera en el 2021:
“Los maestros no olvidan, siempre nos recuerdan estar en lugares seguros, mantenernos comunicados y cuidarnos, sobretodo lo mencionan (la desaparición de Salomón, Marco y Daniel) para no olvidarlo, para tenerlo en la memoria”.
Selene y Magdalena
La pandemia hizo que muchas cosas pararan y quedaran en pausa, Selene explica que a ella le parece importante estar presente en la Glorieta dando mantenimiento al memorial de las personas desaparecidas, pero sobre al árbol que se colocó para no olvidar a sus compañeros:
“Justo porque no son sólo tres, somos todos y el resto de los desaparecidos y toda la vulnerabilidad que nosotros sentimos todos los días (…) Y pasar de esa movilización a sentir que se está apagando o se está olvidando, y pasar y ver el jardín descuidado, (…) Porque no solo es una planta, es un símbolo de lo que está sucediendo”.
Tanto Selene como Magdalena reiteran la importancia de mantener vivos estos espacios:
“al final del día, lo que tenemos es un símbolo físico de esto, y así como no queremos que se muera el árbol y tener más plantas (en el jardín de la memoria) no queremos que siga pasando y que todo quede en el olvido”.
Estudié periodismo con resaca de injusticia e intenciones de narrar historias que nos demostraran lo contrario. Escribo sobre la comunidad LGBT+, las protestas sociales y sobre cultura... aunque lo mío lo mío sea el fotoperiodismo, los perritos y los videojuegos.
