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El adolescente de 14 años salió de su casa el pasado 18 de enero y no regresó; el 23 de enero, la Fiscalía de Chihuahua reporta que se localizó su cádaver y sus padres lo reconoce a través de fotografía, pero recibieron el cadáver equivocado. Ahora lo buscan de nuevo.
Blanca Carmona / La Verdad
A casi seis días de haber sido reportado como desaparecido, las autoridades dieron por muerto a Kevin Adrián León Contreras, de 14 años, al entregar a sus familiares un cadáver que no correspondía a él. Sus padres, en pleno velorio, descubren que el adolescente recibido en el ataúd no era su hijo.
La Fiscalía General del Estado (FGE) responsabilizó del error a los padres de Kevin, argumentando que firmaron un protocolo de identificación después de haber visto una serie fotográfica del cuerpo que recibieron.
El pasado 18 de enero a las 6 de la mañana, Kevin salió de su casa ubicada en la colonia Francisco Sarabia, al poniente de Ciudad Juárez, para entregar una herramienta que le habían prestado, porque asistía a un curso de herrería, y desde entonces no regreso, dijo una de sus tías quien pidió ser identificada únicamente como Guadalupe.
La mujer narró que horas después se interpuso la denuncia por ausencia, ante la FGE zona Norte y el domingo 23 de enero se les notificó de la localización de un cadáver que podría corresponder al de Kevin. Por lo que la mamá del menor se presentó en las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) y ahí le mostraron una serie fotográfica borrosa de un cuerpo para ver si lo reconocía como el de su hijo.
A la una de la mañana del lunes 24 de enero, personal de una empresa funeraria entregó el cuerpo a la familia de Kevin en su hogar. Ellos decidieron abrir el ataúd y descubren no era el cuerpo del adolescente.
Al ver que no se trataba de Kevin, originario del Estado de Coahuila, avisaron a la funeraria y también se trasladaron a las instalaciones de la FGE zona Norte, iniciando una travesía burocrática en un intento por recuperar el cuerpo de su ser querido. Hasta que la Fiscalía volvió a considerar a Kevin como desaparecido.
“Dudábamos porque muchas fotos se veían borrosas, mi hermana quería estar segura y pidió ver el cuerpo, pero no aceptaron. Pidió una prueba de ADN aunque nosotros la pagáramos, pero nos dijeron que se tardaba seis meses”, indicó Guadalupe.
Enrique Rodríguez Vázquez, jefe de información de la Dirección de Comunicación Social de la FGE responsabilizó del error al padre de Kevin.
“El papá identifica en Servicios Periciales a su hijo como tal después de que se recuperó este cuerpo en un domicilio y se hizo el protocolo de entrega en base al reconocimiento que hizo esta persona… una vez que se aclara que no se trata de este menor sino de otra persona se continúa la búsqueda del menor Kevin, puesto que hay denuncia de desaparición y a la vez inician las investigaciones para la identidad de la persona que se había entregado de manera equivocada”, dijo el funcionario estatal.
Rodríguez Vázquez aseguró que la mamá de Kevin fue la primera que tuvo contacto con personal de la Fiscalía. A ella se le mostró una serie fotográfica de un cadáver, pero no pudo concluir el reconocimiento por el estado emocional en que se encontraba y fue canalizada a la Comisión de Atención a Víctimas además le solicitaron que compareciera otro familiar directo. Fue cuando acudió el papá del adolescente.
Rodríguez Vázquez reconoció que los protocolos establecen que para un reconocimiento forense primero se deben mostrar las fotografías del cadáver en cuestión, dar a conocer las características personales del difunto y luego permitir la observación del cuerpo. Sin embargo, en este caso se consideró suficiente con mostrar las fotografías.
“El protocolo señala que primero se muestran fotografía, se indican las características del cuerpo de la persona y luego se pasa a la identificación personal y ella nada más vio fotografías”, refirió para luego precisar que la identificación se interrumpió por el estado emocional y agregar “el protocolo lo tenemos firmado por el papá”.
Los cotejos a través de ADN solo se realizan cuando a simple vista no es posible de reconocer un cuerpo por estar en un estado de descomposición o dañado y también cuando existe la duda por parte de quien realiza la identificación, dijo Rodríguez para luego referir que en el caso de Kevin no se ha planteado realizar ese procedimiento.
La familia de Kevin indicó que inicialmente se les había dicho que junto al cuerpo que decían era de su sobrino se liberaron otros dos cuerpos y en un momento ellos pensaban que había un error por parte de la funeraria y trataron de rescatar el cuerpo de adolescente, pero luego se les explicó que ninguno correspondía a Kevin y nuevamente la Fiscalía consideró al menor como ausente o desaparecido.
La mañana de este miércoles 26 de enero a la familia de Kevin se le pidió que acudiera al Hospital Infantil de Especialidades porque un paciente menor de edad había sido ingresado con lesiones de gravedad, tras ser hallado maniatado, y las autoridades consideraban que podría ser Kevin Adrián. La mamá del adolescente acudió y determinó que tampoco era él.
Horas más tarde, agentes ministeriales le informaron a la familia que habían recuperado un video donde al parecer se observa a Kevin cargando una mochila. Un material captado justo el domingo cuando las autoridades ya lo daban por muerto.
Además, los policías les indicaron que hay datos de que los días 19 y 20 de enero el menor fue visto en la colonia Francisco Sarabia.
Mientras la Fiscalía aclará qué pasó en este caso, familiares del menor desaparecido, acompañados de agentes ministeriales, comenzaron la tarde de este miércoles a pegar pesquisas de Kevin en la calle Emilio Carranza de la colonia Francisco Sarabia, en un intento por localizar al adolescente.
“La Fiscalía reconoció error. Nosotros estamos muy desconcertados. La verdad, están jugando con la mente de nosotros y lo único que queremos es que aparezca”, expreso la tía del menor quien fue descripto como de 1.65 metros de estatura, 60 kilos de peso, complexión débil, ojos color café, cabello abundante y lacio en color negro.
Cualquier información sobre su paradero se recibe al teléfono 614 4293300 extensiones 56455, 58132, 14289 y 10706.
El cuerpo erróneamente identificado como el de Kevin, permanece en las instalaciones del Semefo en calidad de desconocido y las investigaciones están muy avanzadas, aseguró Rodríguez.
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Este texto se publicó originalmente en La Verdad de Juárez:
La doble desaparición de Kevin: en velorio sus padres descubren que no era el cuerpo de su hijo