El pasado 11 de junio el Ayuntamiento de Poncitlán aprobó el Programa de Ordenamiento Ecológico Regional con lo cual se generó un cambio en el uso de suelo para favorecer la creación de un corredor industrial y turístico en la ribera del Lago de Chapala; por ello, habitantes de esas localidades se trasladaron a Guadalajara para denunciar estos actos que violentan los derechos humanos de las comunidades indígenas asentadas en la zona, además señalaron que de seguir con este plan se van a agudizar las enfermedades renales que ya padecen los habitantes, pues aumentará la contaminación del agua con la presencia de más industrias.
Por Leslie Zepeda / @lesszep2
Foto portada: Darwin Franco
“No a los corredores industriales y turísticos en el Lago de Chapala” fue la consigna que motivó a las y los habitantes de la ribera del Lago de Chapala para desplazarse hasta Guadalajara para protestar por lo que consideran una grave violación a sus derechos humanos y un atentado contra el ecosistema de esta región.
El problema que movilizó a las y los integrantes del Colectivo Justicia para el Pueblo, la Asociación de Vecinos de Arcos de Guadalupe y regidores de oposición del municipio de Poncitlán surgió desde septiembre de 2020 cuando luego de emitirse la convocatoria lanzada por la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial que da pie a la aprobación ciudadana del Programa de Ordenamiento Ecológico Regional (POER), el Plan Regional de Integración Urbana (PRIU) y el Programa Municipal de Desarrollo Urbano, el cabildo de dicho municipio aprobó su POER modificando el uso de suelo de diversas zonas protegidas tanto por su riqueza natural como por su valor patrimonial al ser territorios indígenas para permitir que ahí se puedan construir corredores industriales y/o turísticos.
A estos cambios realizados en Poncitlán también se han sumado otros municipios que forman parte de la ribera del Lago de Chapala como: Jamay, Jocotepec, Ocotlán, Chapala, Tizapán el Alto y Tuxcueca.
“A través de los Programas de Ordenamiento se busca contribuir a la preservación y restauración del equilibrio ecológico desde una visión de cuenca para impulsar proyectos de inversión pública y reposicionar a la Ribera de Chapala como destino turístico recreativo, de descanso y salud”, esto es lo que aparece desde las páginas oficiales que promovieron estas consultas para el reordenamiento territorial de la región.
Sin embargo, desde pobladores de estos municipios, aseguraron lo contrario, ya que denunciaron que jamás se hizo la difusión necesaria para que las y los ciudadanos de dichos municipios pudieran dar su opinión y participar en la consulta. Misma que sólo se hizo de manera digital, lo que dejó fuera a cientos de ciudadanos y ciudadanas que no tienen acceso a internet.
La regidora por MORENA, Lilia Verónica Lomelí Rodríguez, mostró su enojo e indignación con el gobierno estatal al permitir y promover acciones secundarias en una zona marcada por las enfermedades crónicas de tipo renal:
“El año pasado sacaron esta consulta pública amañada, de la cual ni siquiera hicieron propaganda y en plena pandemia. No notificaron a los núcleos agrarios. Fue un proceso antidemocrático No puede ser que sigan esta sistematica violación a los derechos humanos que nos tienen en segundo lugar mundial de enfermedad renal”.
La Ribera de Chapala es donde más casos de insuficiencia renal se han registrado en los últimos años, pues conforme los registros del Foro Socioambiental GDL son más de 8 mil casos los que se han detectado en esta región en los últimos diez años.
Al micrófono, Lilia Verónica Lomelí Rodríguez (Foto: Leslie Zepeda).
Cambios a modo
Quienes participaron en la protesta realizada en la Rotonda de las y los Jaliscienses Ilustres, afirmaron que todas estas irregularidades en el municipio de Poncitlán comenzaron el pasado 30 de septiembre de 2020 durante una sesión de cabildo; ahí presentó la iniciativa de cambio de uso de suelo que fue aprobada con 10 votos a favor de 11 regidores.
Lilia Verónica Lomelí Rodríguez fue la única en oponerse y junto con dos núcleos agrarios: Tlachichilco del Carmen y el Ejido de San Juan Tecomatlán, “metieron una prórroga, en el mes de octubre, para que la consulta estuviera activa durante un mes más y así tomar la mejor decisión”. Prórroga que terminó el 24 de noviembre del año pasado.
Luego de esto, el 11 de junio de 2021, igualmente a través del cabildo de Poncitlán se aprobaron tres iniciativas: Programa de Ordenamiento Ecológico Regional (POER), el Plan Regional de Integración Urbana (PRIU) y el Programa Municipal de Desarrollo Urbano, en las que se fincó la posibilidad de generar un gran corredor industrial y turístico en este municipio, mismo que conectaría con lo que también se planea realizar en toda la ribera del Lago de Chapala.
“Este POER avalado por Semadet es una violación sistemática de derechos humanos” enfatizó la regidora; para esta lo más grave que se aprobó es la iniciativa para el reglamento de construcción y gestión de desarrollo urbano de Poncitlán, acción que se avala en la consulta pública para los planes parciales del corredor turístico, industrial y comercial.
Desde las y los convocadores llamaron a la ciudadanía a protestar en contra de las acciones tomadas por el gobierno de distintos niveles porque, según argumentan, el problema de contaminación se agudizará en una región que abastece en un 60% el agua para las y los habitantes del Área Metropolitana de Guadalajara.
El próximo 7 de julio a las 12 del día, como parte de una serie de acciones en contra del corredor industrial y turístico, se realizará una manifestación en la plaza principal de Poncitlán para mostrar su inconformidad ante este proyecto.