Al menos ocho de las más de 19 mujeres sobrevivientes de las violencias y agresiones perpetradas por el psicoanalista Gabriel “N”, se manifestaron a las afueras de la Fiscalía del Estado de Jalisco este martes 11 de mayo.
Acompañadas de mujeres defensoras y activistas feministas, denunciaron que luego de que las víctimas levantaran múltiples denuncias en contra de este sujeto por diversos delitos, entre ellos: abuso sexual, pedofilia, lesiones, violencia psicológica y hasta fraude, éste se encuentra en libertad y “se pasea por la ciudad”, aunque ya cuenta con una orden de aprehensión girada desde hace cinco meses, incluso, cuando se emitió una Ficha Roja por la Policía Internacional (Interpol, por sus siglas en inglés).
Si bien, reclamaron la presencia del fiscal del estado, Gerardo Octavio Solís, fue el fiscal de Derechos Humanos, Jorge Alejandro Góngora quien salió en su lugar y demoró más de dos horas en atender las demandas legitimas de estas mujeres, quienes pedían conocer el avance de sus denuncias, así como, las razones por las cuales su agresor permanece libre y sin sanción.
Y es que, aunque llamaron a las autoridades a romper el pacto patriarcal, estas decidieron cerrar las puertas de la fiscalía y no dejarles entrar a demandar justicia.
Por Dalia Souza / @DaliaSouzal
Hartas de esperar a que la Fiscalía del Estado de Jalisco y el Centro de Justicia para las Mujeres hagan su trabajo y detengan a Gabriel “N”, psicoanalista que abusó y violentó a más de una veintena de mujeres, jóvenes y niñas en los últimos años, un grupo de mujeres defensoras, solidarias y feministas se manifestaron a las afueras de las instalaciones de la fiscalía en la calle 14 de Guadalajara, Jalisco para exigir justicia.
“Rompa el pacto señor fiscal” coreaban.
Acuerpando la lucha de las sobrevivientes, reclamaron a las autoridades respuestas frente a su nulo actuar, ya que, según explicaron, a más de cinco meses de existir una orden de aprehensión y una Ficha Roja emitida por la Policía Internacional (Interpol, por sus siglas en inglés), el sujeto continúa libre “paseándose por la ciudad”.
Al respecto, advirtieron que han sido proporcionados ubicaciones y domicilios puntuales donde presuntamente se le han visto, no obstante, estos datos han sido pasados por alto por ministerios públicos y policías investigadores quienes no han ejecutado la orden de aprensión en su contra, situaciones que ponen en riesgo la seguridad, la vida, el bienestar y la tranquilidad de sus víctimas (algunas de ellas sin medidas de protección dictadas).
Si bien, las mujeres reclamaban que el fiscal del estado, Gerardo Octavio Solís saliera a escuchar sus exigencias, en su lugar fueron recibidas por el fiscal de derechos humanos, Jorge Alejandro Góngora, quien, en opinión de las manifestantes fue incapaz de atender sus demandas.
“Se está en la búsqueda y localización de la persona, se ha pedido la colaboración de varios estados. Si fuera el caso que alguna persona haya visto a la persona en la entidad, me ofrezco para hablar directamente con esa persona y sin ningún intermediario dar con el paradero de la persona (Gabriel “N”)” expresó Góngora a las manifestantes tras su llegada.
“Se les han dado domicilios, fotos de los lugares y lleva 180 días y no lo han agarrado” arremetió Paulina, una de las sobrevivientes que denunció a Gabriel “N” -quien, además, fuese pareja de su madre- desde el 29 de diciembre de 2020. Además, la joven señaló que la fiscalía cuenta con toda la información para dar con el paradero del sujeto, incluso, le fueron entregadas fotografías del domicilio donde presuntamente se encontraba resguardado.
“Usted no tiene idea de lo que estamos hablando”, dijo una de las activistas a Góngora. Y es que, ante la falta de respuestas a sus cuestionamientos, le pidieron que llamara a una persona que realmente conociera el caso: “quiere entrevistar a las víctimas que ya fueron entrevistadas un sinfín de veces, que ya fueron a los peritos tres veces a ser revictimizadas, que ya pidieron justicia más de diez veces, entonces ¿por qué no le habla a alguien que esté encargado del caso, que sepa de lo que estamos hablando? y que nos diga por qué no han ejecutado una orden de aprehensión” sentenció.
Minutos después, la orden del funcionario fue cerrar la puerta de las instalaciones de justicia para impedir el paso de las manifestantes, entre las que se encontraban al menos ocho víctimas del sujeto señalado, y que pretendía entrar a las instalaciones para ser atendidas.
“¡Que abran las puertas!” exigían, pero esto no sucedió. Luego, con el megáfono en la mano, Paulina volvió a tomar la palabra:
“Ha pasado mucho tiempo desde que salieron nuestras denuncias, ya no somos una, ya no somos dos, hemos sido muchísima gente que ha levantado la voz y hay muchísima gente que aun no la levanta por miedo, porque han pasado cinco meses desde que salió la orden de aprehensión y él sigue libre. Y no solamente sigue libre, sigue paseándose por la ciudad… 180 días han pasado y el sigue paseándose por la ciudad y nosotras las víctimas seguimos escondiéndonos hasta donde podemos, nos fuimos del país por miedo, muchísimas siguen en el anonimato, no sabemos qué más hacer, de verdad no lo sabemos”.
“Hicimos todo lo que teníamos que hacer por nuestra parte, perito psicológico, perito ginecológico, levantar nuestra narración de hechos, denunciar, qué más quieren, domicilios, fotos, nombres, ¡ya se los dimos! Y él sigue libre”, manifestó.
Luego de esperar más de una hora y de corresponder a la petición del fiscal de derechos humanos, quien les había prometido que entrarían, pero sólo de “manera ordenada” y únicamente a las víctimas y sus representantes, les negó nuevamente el paso, advirtiéndoles que sus casos se encontraban en el Centro de Justicia para las Mujeres. Molestas e indignadas, decidieron tomarse de las manos y rodear al funcionario para asegurar que este cumpliera con su palabra y que, por lo menos, se comunicara con algún otro funcionario que pudiera acudir y ofrecer certezas sobre las investigaciones en curso alrededor del caso.
Otra hora después, llegó el titular de la Unidad Especializada de Investigación de Feminicidios de la Fiscalía del Estado de Jalisco, José Alberto Mora Trujillo, quien con algunos documentos en la mano precisó que se han realizado trabajos de búsqueda con los datos proporcionados por las víctimas, así como, con otros obtenidos a través del área de inteligencia de la fiscalía.
Señaló que los domicilios ofrecidos por las agraviadas “han aportado labores por parte de policía investigadora”, sin embargo “no se ha generado la posibilidad de verlo y tenerlo a la mano y poder cumplimentar ese mandamiento judicial”.
Existen al menos 17 denuncias contra Gabriel “N”, dos de ellas por abuso sexual. Las otras describen delitos como: violencia física, lesiones, abuso psicológico, responsabilidad profesional, usurpación de profesión y fraude.
Hasta ahora, cuatro mujeres, víctimas sobrevivientes de las agresiones de este sujeto han expuesto sus testimonios a través de diversos medios, particularmente, a través de la plataforma YouTube y el canal Víctimas del Psicoanalista Dr. Gabriel “N”.