La Organización Mundial de la Salud (OMS) define como un “aborto inseguro o peligroso” al procedimiento que es practicado por una persona carente de capacitación necesaria, a aquel que se realiza en un entorno que no cumple con las normas médicas mínimas, o en el que existen ambas circunstancias.
En la actualidad, el porcentaje de personas que realizan acompañamiento a cuerpos gestantes que desean interrumpir un embarazo, se desconoce, sin embargo, lo que sí se sabe es que las razones por las que deciden acompañar están relacionadas con la necesidad de gestionar de manera autónoma los derechos sexuales y reproductivos, así como enfrentar la violencia de genero.
Ante esto, Safe2choose en colaboración con Ipas CAM Centroamérica y México realizaron una encuesta internacional a acompañantes de aborto con el objetivo de conocer las experiencias de las personas acompañantes y proveedoras de aborto en todo el mundo.
Por Jacqueline López / @jacqueline_lope
De acuerdo con la encuesta realizada por Safe2choose en colaboración con Ipas México, el 74.4% de las personas acompañantes y proveedoras de aborto son mujeres; el 21.5% hombres y una pequeña parte fueron personas transgénero y no binarias.
Además, 22.2% mencionaron ser médicas y médicos generales y una quinta parte ginecólogos y/u obstetras; por lo que, solo el 7.8% no cuenta con ninguna profesión relacionada a la salud.
Casi la mitad de las personas encuestadas recibieron su formación como acompañante en organizaciones no gubernamentales, puesto que, ellas y ellos son quienes se encargan de subsanar el vacío que tiene el Estado como proveedor de procedimientos de aborto seguros con personas capacitadas e información adecuada.
En ese sentido, ocho de cada 10 personas acompañan abortos que se realizan con medicamentos; mientras que, un 50% acompañan y/o proveen abortos realizados con aspiración.
De las y los participantes de esta encuesta solo el 5.2% “a veces” se siente avergonzado al hablar de su trabajo, esto debido a la preocupación a ser juzgados, tener que justificarse a sí mismos y el miedo a sufrir violencia, marginación y trato diferente.
Algunas personas, incluso, señalaron tener miedo de perder la licencia de su profesión o enfrentar alguna consecuencia legal al respecto, debido a la restricción legal que existen en gran parte de América Latina.
La encuesta deja en evidencia que 13.4% de las personas ha enfrentado agresiones violentas en su trabajo: 77.3% violencia verbal; 50% acoso, intimidación, difamación; y 31.8% amenazas.
Además, 1 de cada 5 enfrenta investigaciones legales o ha sido víctima de la fuerza pública.
Frente a esta realidad siguen realizando acompañamientos, pues sienten un compromiso con aquellas que lo requieren y buscan ayudarlas a tener acceso a sus derechos. No obstante, consideraran que la legalización del aborto, la implementación de políticas públicas, el acceso a servicios médicos, el entrenamiento especializado por parte del Estado, así como, la disminución del estigma hacia quien acompaña y provee servicios de aborto facilitaría su trabajo.
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La Encuesta Internacional de Personas Proveedoras y Acompañantes de Aborto, realizada por Safe2choose e Ipas CAM Centroamérica y México fue respondida por 339 personas que hacen acompañamiento y/o proveen abortos inducidos en países de seis regiones diferentes: América Latina y El Caribe (56.3%); Europa (14.2%); África (9.4%); América del Norte (9.1%); Asia (8.8.%) y Oceanía (2.1%). Consulta el resumen ejecutivo aquí.
