Desde Mujeres
Por Miriam Edith López González / @miriGnzL
Quiero explicar algo antes de comenzar el siguiente texto, pues me parece de gran importancia que lo sepan y además quiero tomar esto con gran responsabilidad y ética social. Cuando hablamos de feminismo no solo es que exista uno solo, pues hay diferentes variedades de feminismos, que ya después se deberá explicar, pero algo que me ha quedado claro es que ya no importa cuál sea la posición ideológica de preferencia de las mujeres, ya que en México se ha hecho un mar de feminismos que tienen como objetivo principal el erradicar la violencia contra nosotras, me sumó a esta lucha pues el yugo de la violencia la vivimos todas de una u otra forma en cualquier etapa de la vida.
Y como dice el título de este texto, pongo de ejemplo el mar, las olas y el poder de un huracán, esto para explicar la gran fuerza que tiene cada uno de los feminismos dentro de su lucha y que al unirse comienzan nuevas transformaciones. Y es como mencionan las compañeras feministas zapatistas el 8 de marzo de 2019 en su encuentro feminista en Chiapas: “bueno, pues ahora sí vamos a empezar a construir el mundo que merecemos y necesitamos”.
Durante la historia de México el machismo ha estado presente en diferentes espacios de la vida cotidiana, al igual que la represión y la violencia que han vivido o siguen viviendo las mujeres mexicanas. En un país que cada día se matan a diez de sus mujeres en manos de hombres violentos, no se puede negar y ocultar la cultura del machismo y la cruel realidad de la violencia contra la mujer.
Yo soy socióloga de profesión y uno de mis deberes como científica social es ver los procesos sociales, culturales, educativos, políticos e históricos de mi país, al igual que de América Latina y el mundo; sin embargo, en esta última década los movimientos feministas se hacen cada vez más fuertes, estamos ganando espacios y estos los estamos convirtiendo en espacios seguros para nosotras, la lucha de años de miles de mujeres que levantan la voz para poder frenar la violencia contra nosotras es más que visible es un huracán.
Nos hemos unido casi todas y aquellas que aún no quieren ser parte de esto, pues se respeta y en el momento que ellas necesiten apoyo se les brindara, sin juzgar o reprochar, su pasado, por lo tanto, lo que trato de decir es que el movimiento feminista en México se ha vuelto en uno de los movimientos sociales más orgánicos del siglo XXI en América Latina y el mundo.
Los mares del feminismo habían estado apaciguados, pero toda la violencia en México ha logrado que comience a tener oleaje y ahora más con la pandemia del COVID-19 pues los indicies de violencia y feminicidios han incrementado. Y las mujeres que tienen como convicción apoyar a las otras que se encuentran en problemas se movilizan, para socorrerlas sin pedir nada a cambio.
Cuando un “presunto” violador quiere ser gobernador en el México del siglo XXI
Parece surrealista he incluso se siente como si fuera una broma de mal gusto que, en México a pesar de ser un país de altos índices de violación sexual, los políticos que tienen demandas judiciales por violación busquen ser gobernantes, sin embargo, eso está pasando en 2021.
El feminismo no es oposición de ningún partido político, el feminismo es un movimiento social que busca la justicia para todas aquellas que ya no están con nosotras y fueron víctimas de violencia por parte de hombres violentos, el feminismo es más humanista que cualquier ideología política.
Ningún violador deberá ser o tener espacios políticos, el feminismo en este momento se ha convertido en un huracán con tal fuerza que desafía al poder político sin tener miedo. Las olas se agitan tanto que la cultura política del país comienza a tener quiebres, como el caso del partido MORENA, las mujeres militantes y simpatizantes y demás grupos feministas no quieren y no apoyan a un violador.
Partes del tejido social de México se reconstruye por la fuerza feminista que lucha, para que no ocurran estos casos.
Del ya Chole al ya basta de violencia y la ola se vuelve huracán
El presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá buenas intenciones para una posible transformación del país, sin embargo, lleva un discurso en el cual pareciera que deslegitima el movimiento feminista, no todas somos oposición, pedimos congruencia y justicia, el carácter político electoral lo ciega a tal grado que dice frases que decepcionan, pues el “YA CHOLE”, que hizo referencia con lo que le preguntaba una periodista respecto al caso del “presunto” Violador que podría ir para candidato a un estado de la república Félix Salgado Macedonio, molesta, pues ya chole a la violencia contra la mujer.
Y como he dicho en este texto el feminismo es una ola que se convierte en huracán y busca la manera de llegar a la justicia, y solo eso queremos.
Si bien, muchos se suben al movimiento siendo lo contrario para cuestiones políticas y electorales, lo que sí pasa es que el feminismo necesita la ayuda de políticas y no politiqueros como Félix Salgado.
¿Entonces qué pasa cuando se unen los feminismos?
Enseñan a no reproducir la violencia y hacer justicia a las víctimas, los feminismos no son oposición es el claro ejemplo de la necesidad de erradicar el machismo y hacer congruentes.