“Soy autista, no puedo estar quieta y en un sólo lugar, estar encerrada me enoja mucho”, fue uno de los testimonios que se recabó en el informe #InfanciasEncerradas que elaboró la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México; este documento permitió obtener información sobre cómo los niños y adolescentes con discapacidad han vivido el actual confinamiento generado por el coronavirus.
Por Keren Elizabeth Rodríguez
“Asumirse como población vulnerable; temer a enfermarse por las limitantes de ejercicios durante la pandemia; no tener acceso al monitoreo de sus enfermedades o no poder accederse a su rehabilitaciones o terapias psicológicas” fueron algunos de los miedos expresados por niñas, niños y adolescentes con discapacidad que formaron parte del reporte temático del informe #InfanciasEncerradas elaborado por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México
La consulta fue diseñada para grupos entre 3 a 6 años y 7 a 17 años; las preguntas se crearon con la finalidad de adaptarse a los lectores dependiendo de su discapacidad, por ejemplo, en Lenguaje de Señas Mexicano; con adaptaciones para aquellos que tienen una discapacidad visual e, incluso se adaptó el estudio para poder tener una interpretación para lenguas indígenas.
En el Informe participaron mil 307 personas con discapacidad: 51% fueron niños, 46% niñas y 3% se definió con otro género.
Teniendo en cuenta la cantidad de personas que participaron en la consulta, 44% indicó tener discapacidad visual; 11% física o motriz; 10% intelectual; 8% auditiva; 4% múltiple, 3% psicosocial y 19% omitieron la pregunta.
En el Informe se presentaron preguntas para conocer cómo están viviendo su encierro; por ejemplo: ¿Con quién vives?, ¿Qué tan seguido discutes con la persona que te cuida?, ¿Cuántos baños y cuartos tiene tu casa?, ¿Cuáles son las cosas que más te preocupan? y la más dominante: ¿Qué significa el encierro para ti?
Al llegar a la pregunta: ¿Qué significa el encierro para ti?, las palabras más repetidas fueron: tristeza, casa, no poder, aburrimiento, desesperación, entre otras.
Algunos de los testimonios que engloban este sentir fueron los siguientes:
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“El coronavirus es feo” Niño con discapacidad intelectual, 9 años, Guanajuato.
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“A veces te enfermas de estar tanto tiempo encerrado” Hombre adolescente con discapacidad motriz, 16 años, Ciudad de México.
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“Tristeza, preocupación y no duermo. Si a mis papás les pasa algo, ¿quién cuidará de mí?” Niña con discapacidad intelectual, 12 años, Ciudad de México.
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“Ahora entendemos lo que sienten los animales” Hombre adolescente con discapacidad visual, 15 años, Guanajuato.
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“Comprender y saber disfrutar cada momento” Adolescente con discapacidad visual, no contestó su sexo, 14 años, Durango.
Así mismo, se presentó una pregunta con contraste de esperanza y fe en la pandemia: ¿Si pudieras pedir un deseo cuál sería? Las respuestas más repetidas fueron: salir, poder, escuela, vacuna, todo.
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“Que termine la pandemia” Niña con discapacidad motriz, 11 años, Ciudad de México
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“Que se acabara el coronavirus y que toda mi familia salga bien por el coronavirus” Niña con discapacidad visual, 10 años, Baja California.
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“Que mi abuelo salga del hospital sano” Mujer adolescente con discapacidad visual, 15 años, Ciudad de México.
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“Que todos salgan adelante después de esto” Hombre adolescente con discapacidad visual, 15 años, Ciudad de México.
En esa pregunta se recibieron muchas respuestas sobre el nuevo proyecto de vida que quieren emplear después de la pandemia y metas a corto, mediano y largo plazo.
#InfanciasEncerradas obtuvo datos que indican las barreras que las niñas, niños y adolescentes con discapacidad enfrentan día a día; así como sus tristezas y sueños.
Los resultados de este Informe se relacionan con “las barreras actitudinales, en las comunicaciones y físicas a las que niñas, niños y adolescentes con discapacidad se enfrentan en su vida cotidiana” y en las que destacan temas relacionados con sus derechos:
“a la educación, la salud –concretamente el acceso a los servicios de salud física y mental, así como a la rehabilitación–, la recreación y el juego, la accesibilidad, la igualdad y la no discriminación, así como el desarrollo progresivo de la autonomía y la identificación de los apoyos con los que cuentan y los que necesitan”.
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Si deseas conocer el Informe completo lo pueden hacer aquí: