Debido al incremento de los feminicidios y llamadas de auxilio durante la pandemia ocasionada por el coronavirus y la enfermedad que éste provoca COVID-19, la Red Nacional de Refugios (RNR), el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) con el apoyo del Fondo Canadá y la Unión Europea, construyeron una alianza para fortalecer los acompañamientos a las mujeres en el contexto de pandemia a través de la campaña #DistanciaSeguraySinViolencias ¡Por una normalidad sin violencias!
Con presencia en 17 estados, esta iniciativa tiene como objetivo contribuir a que las mujeres, niñas y adolescentes en situación de violencias, así como, familiares de víctimas de feminicidio o desaparición, puedan acceder a servicios de atención y acceso a la justicia, en el contexto de la crisis sanitaria.
Por Sofía Ávila/@SofíaCaravi
La directora de la Red Nacional de Refugios (RNR), Wendy Figueroa, compartió que, en estos primeros cinco meses de confinamiento, dentro de la Red se ha incrementado en un 71% el número de llamadas de auxilio por violencia en los hogares, a la vez que expresó su preocupación por el alza en los feminicidios que ahora se calculan en 11 por día.
Aunado a ello, señaló que conforme se reactiven los diferentes sectores en esta nueva normalidad, se espera un mayor incremento en las solicitudes de ayuda, dado que; “mientras más tiempo se está con el agresor o persona agresora se limita la posibilidad de pedir auxilio”. De esta manera, advirtió que, conforme la nueva normalidad avance, las mujeres volverán a retomar el uso de su voz y podrán solicitar ayuda.
Por otra parte, María de la Luz Estrada, coordinadora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) mencionó que de marzo a julio de este año (2020) se documentaron 21 mil 292 delitos sexuales, específicamente: 6 mil 440 violaciones sexuales; 8 mil 762 abusos sexuales; 2 mil 189 denuncias por acoso; 707 denuncias por hostigamientos sexuales; entre otros, de acuerdo con datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
De igual manera, se tiene registro de 550 casos de mujeres, niñas y adolescentes desaparecidas; 90 mil 279 casos de violencia familiar; y mil 585 mujeres han sido asesinadas, sobre éstos últimos únicamente 384 casos están siendo investigados como feminicidio.
Este contexto de pandemia ha traído mayores dificultades para las víctimas, quienes se arriesgan a contagiarse de COVID-19 al salir a realizar su denuncia y de la misma forma existe el riesgo para las abogadas que las acompañan.
“Tuvimos casos de mamás que se contagiaron de COVID solamente porque un día salieron a la fiscalía” comentó Luz Estrada.
No obstante, las diferentes ONG no detienen esfuerzos y como lo reiteró luz:
“Ante este contexto las organizaciones de sociedad civil, defensoras de los Derechos Humanos no nos paralizamos, por lo contario, hemos estado buscando la articulación de con la Red de Refugios y con otras alianzas que nos permitan seguir buscando caminos y formas para que la pandemia no nos paralice, no paralice a la autoridad”
Por su parte, la campaña #DistanciaSeguraySinViolencias ¡Por una nueva normalidad sin violencias! tiene entre sus compromisos difundir información sobre las organizaciones de la sociedad civil que acompañan casos de mujeres en situación de violencia, así como, colocar material informativo en espacios públicos para que las mujeres, niñas y adolescentes que sufren violencia sepan que no están solas y que pueden acudir a instancias u organizaciones que pueden apoyarlas.
A su vez, se busca que sirva de medio para comunicar las rutas de acción que pueden emprender las familias ante una desaparición o un feminicidio, e informar sobre cómo obtener una orden de protección para las mujeres en situación de violencia en tiempos de COVID-19.
La campaña tiene presencia en al menos 17 estados de la República mexicana: Aguascalientes, Baja California, Campeche, Chiapas, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Puebla, Sonora, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz y Yucatán.
Esta situación extraordinaria no debe intervenir en una vida libre de violencia y como finalizó Wendy Figueroa:
“Ninguna razón, ningún contexto, ninguna pandemia debería estar por encima de los Derechos Humanos”.