Para el sistema judicial mexicano que omite la perspectiva de género, los feminicidios, la brecha salarial y todas las demás violencias que sufren las mujeres a diario,siguen sin ser por razones de género.
Ante esta realidad y con el fin de que las mujeres pierdan el miedo a exigir justicia como uno de sus derechos,la colectiva feminista Cuerpos parlantes,en colaboración con la abogada Carolina Cordero,invitan al taller de autodefensa para mujeres“Primeros auxilios jurídicos”,que se llevará a cabo del 3 al 24 de febrero.
Por Itzel Ximena Torres / @ximena_tra
La violencia omnipresente contra las mujeres en México las ha obligado aprender a hacer llaves chinas, seguir un protocolo de seguridad cuando utilizan plataformas de transporte como Uber, y otras habilidades de autodefensa, pero ¿qué pasa cuando las despiden injustificadamente, desean conseguir la custodia de sus hijos para protegerlos o a la violencia que sufren requiere procedimientos legales?
Ana Aceves Huerta fue localizada sin vida en octubre del 2018, pero las autoridades no catalogaron su asesinato como feminicidio y a más de un año, su agresor sigue libre.
Abril Pérez Sagaón fue golpeada con un bate de béisbol por su ex esposo el 4 de enero del 2019. El hombre fue detenido por intento de feminicidio, pero el 8 de noviembre del mismo año fue puesto en libertad cuando el juez del caso reclasificó su delito a violencia familiar sin acciones penales. Dos semanas después, el 25 de noviembre, a Abril la asesinaron en la Ciudad de México.
Así como en estos casos, la experiencia de la abogada y politóloga de la Universidad de Guadalajara, Carolina Cordero, demuestra que la justicia en México no se imparte desde una perspectiva que reconoce que la discriminación, la desigualdad y otras violencias que sufren las mujeres se derivan por motivos de género. Por el hecho de ser mujeres.
Si a esto se le agrega que acceder justicia es un privilegio que no todas pueden costear por ser una herramienta capitalista, el resultado es una profunda invisibilización de la desigualdad entre hombres y mujeres, el “principal sazonador para la impunidad” que permite, entre otras cosas, que los agresores sigan atacando. A veces hasta terminar con la vida.
Consciente de la situación, Carolina y la colectiva feminista Cuerpos Parlantes llevarán a cabo el taller “Primeros auxilios jurídicos: Taller de autodefensa”, del 3 al 24 de febrero en Cuerpos parlantes_espacio feminista y de investigación urbana.
El taller se dividirá en ocho sesiones en las que se abordarán las materias que la abogada ha identificado como lo más vulnerables para las mujeres: derecho familiar, derecho laboral y derecho penal. En esa línea, entre los temas a tocar están la patria potestad, violencia intrafamiliar, divorcio, acoso sexual, puestos laborales desiguales, feminicidios, aborto y otros.
La violencia machista en el sistema judicial
“El derecho en México tiene sus bases en el derecho romano y ellos fueron altamente machistas. Tanto que consideraban a las mujeres objetos. Fue hecho por hombres y para hombres” y nosotros lo replicamos, como explica Carolina.
Aunque algunos hombres también expertos en derecho, le han hecho saber que opinan lo contrario. Aseguran que las leyes siempre han estado formuladas bajo una óptica de igualdad y equidad y por lo tanto la existencia de una teoría jurídica feminista no es necesaria. Esa es la primera violencia por invisibilización.
La experiencia profesional de la abogada le demuestra lo contrario día a día, comenzando por el derecho de las mujeres a ocupar espacios de tomas de decisiones jurídicas.
De acuerdo con el Directorio Oficial 2020 del Consejo de la Judicatura del Estado de Jalisco, de los 18 jueces y jueces auxiliares de lo familiar en el Primer partido judicial (la Zona Metropolitana de Guadalajara), solo cinco son mujeres. En los Juzgados de lo Mercantil sólo hay una jueza de diez en total y en los Juzgados de lo Civil hay seis de mujeres de 13.
“Una vez un juez me dijo, el 90% de mi personal aquí en el juzgado es femenino, y yo pienso ‘okey pero ¿quién toma las decisiones?’. Él tiene el poder, tiene a las chicas que trabajan como auxiliares judiciales sí, pero son como las obreras dentro de la estructura judicial”.
Más allá de eso Carolina Cordero ha acompañado casos en los que la perspectiva de género en procedimientos, sentencias y ejecuciones queda muy lejana. En ellos las mujeres involucradas han sufrido afectaciones emocionales, físicas y de manera más notable, económicas: cuando los jueces no fallan a favor en la primera instancia, hay que hacer una apelación y el servicio de asesoramiento jurídico, en este sistema que pone la acumulación de recursos antes que el acceso a la justicia cuesta.
Además, las instituciones que presume el Estado y trabajan para quienes no tienen recurso se ven rebasadas u ofrecen tratos no dignos, “llenos de humillaciones y prejuicios”.
Tomando en cuenta que hasta el 2016 el 20.9% de las mujeres en México habían sufrido violencia económica por parte de sus parejas – relaciones donde se ejerce con mayor frecuencia agresiones contra las mujeres – la situación jurídica se vuelve aún más insostenible, estos datos de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En las afectaciones emocionales, Carolina destaca los conflictos por la patria potestad de menores por la frecuencia con la que ha trabajado en ellos. Asegura que en los casos que ha llevado abunda la violencia psicológica. Los hombres ejercen miedo amenazando a las mujeres con quitarles a sus hijos y están motivados por un sentimiento de venganza patriarcal que demuestra que en realidad no buscan hacerse cargo de sus hijos, sino ganar una lucha de poder contra a la madre.
Así fue, por ejemplo, el caso del padre que el pasado 9 de enero en El Fortín, Zapopan, asesinó a su hijo de cinco años y luego se quitó la vida el mismo mientras se encontraba en disputa por la custodia del menor.
“Antes, cuando demandaban alimentos para menores, las madres tenían que presentar dos testigos para poder acreditar la necesidad de que tus hijos tenían que comer. En la actualidad los jueces fijan una pensión provisional en automático, pero esas pensiones nunca están realmente ponderadas a las necesidades de los menores, nunca” explica Carolina de otras violencias presentes en el sistema a las que se tienen que enfrentar las mujeres.
Hacer el telar más grande del mundo
El propósito del taller es que a través de la teoría y la práctica las mujeres pierdan el miedo a exigir justicia, y Carolina entiende la importancia de esto porque los conocimientos de su profesión la han hecho sentir más segura cuando se ha encontrado en situaciones de riesgo. Ahora busca construir conocimiento colectivo desde su trinchera.
“Si quiero hacer el telar más grande del mundo, no voy a poder hacerlo sola y si nada más yo sé tejer. Este curso es mi manera de que se logre ese telar. Voy a enseñar a las demás a tejer”, dice ella.
La meta es que las mujeres tengan el conocimiento para reconocer abusos, cuidar su economía y no se topen con pared al llegar a un juzgado. No basta solo con reconocer la problemática de nula perspectiva de género.
Con un método que incluye una confrontación de las experiencias de las víctimas y el actuar de las instituciones para después buscar alternativas para atacar el problema, la apuesta es que las mujeres aprendan lo que necesitan sobre sus derechos jurídicos y recuerden siempre como principio: La justicia para las mujeres en México es un derecho y no un favor.
Ante la violencia judicial machista, autodefensa jurídica feminista.
El taller “Primeros auxilios jurídicos: Taller de autodefensa” tendrá un costo de $250 por persona y se divide 8 sesiones.
Lunes 3 de febrero – 5:30 a 8:30 p.m.
Introducción: los métodos del feminismo jurídico de Katherine Bartlett
Martes 4 y jueves 6 de febrero – 5:30 a 8:30 p.m.
Derecho Familiar
Martes 11 y jueves 11 de febrero – 5:30 a 8:30 p.m.
Derecho laboral
Martes 18 y 20 de febrero – 5:30 a 8:30 p.m.
Derecho penal
Lunes 24 de febrero – 5:30 a 8:30 p.m.
Cierre, evaluación personal y colectiva
El cupo es limitado, pero las interesadas pueden presentarse el lunes 3 de febrero en Cuerpos parlantes.