Cuidado y protección de los animales
Por Mónica Lepe, Vocera de Justicia y Dignidad Animal, A.C./@JyDAnimal
Foto portada: © Monica Lepe
El gato es un animal que nos ha acompañado por poco más de 10,000 años; su domesticación comenzó en Egipto y llegó a nuestro continente en la colonización. El gato inicialmente cumplió la función de alejar roedores y otros animales de los sembradíos, lo que le ganó simpatía y cada vez se acercó más a los núcleos humanos. En ese entonces fue protegido y adorado, apareciendo en las características de algunos dioses y acompañando a los faraones en su camino más allá de la muerte.
Ver por ejemplo: Egipto anuncia un descubrimiento de decenas de momias de animales y estatuas
Antes de la Colonia, en Europa, durante la “Santa Inquisición” se cazaron miles de gatos bajo sospecha de herejía; la fe cristiana era la religión reconocida -e impuesta- y cualquier otra creencia era perseguida. El número de felinos descendió en las ciudades lo que propició la proliferación de roedores; al paso del tiempo y aunado a las pobres condiciones higiénicas, surge la peste bubónica que terminaría con la vida de 50 millones de personas. Al llegar Napoleón Bonaparte al poder proclama una ley de protección a los felinos como medida política para evitar otro brote de peste, regresando al gato un poco del respeto perdido.
Ya en nuestro continente, el gato llega cargado con la herencia cultural europea, y esto incluye su discriminación por las creencias y supersticiones así como la admiración a ese animal misterioso y elegante. Actualmente en nuestro país, comparte junto con el perro el espacio principal como animal de compañía en los espacios doméstico, pero también ocupa un lugar preferencial en los abusos y casos de crueldad animal; aún escuchamos decir a las personas que los gatos “son diabólicos, fríos, dan mala suerte” y muchas otras características negativas (y falsas), lo que crea una distancia emocional y rechazo hacia estos animales.
En las redes
Con la llegada del internet y las redes sociales, los gatos han ocupado “el trono” de nuevo, al menos de manera digital. Los videos e imágenes de gatos son parte de los materiales más vistos a nivel mundial y existen canales de “gatos influencers” que son seguidos por millones: Maru, Grumpy Cat, Oscar the British Short Hair, Henri el gato filósofo, entre muchos otros nos maravillan con sus travesuras, sus “reflexiones” y sus aventuras. Y son las mismas redes sociales las que en parte han facilitado que las personas que trabajamos por los gatos podamos difundir un mensaje de respeto, buscando derribar los mitos falsos y negativos impuestos sobre estos hermosos animales a lo largo del tiempo. Aquí un ejemplo es el canal en Youtube de HenriLeChatNoir.
En las plataformas digitales que promueven rescate y adopciones la preferencia del perro sobre el gato es hasta de 10 a 1; en opinión de la rescatista y participante de la plataforma informativa adopta Guadalajara, Cristina Ruíz Gaytán:
“Se presenta este fenómeno basado en una relación estrechamente ligada al ámbito cultural de cada país. Al gato aún en muchos países se le liga con mitos falsos, como el que no forman vínculos afectivos con la familia, no disfrutan el contacto humano y prefieren deambular en las calles. Al contrario del perro que se tiene una percepción mayor de lealtad de este con la familia. Mitos infundados y que año tras año hacen perder hogares a millones de gatos. Poco a poco esta percepción ha cambiado y van en aumento las adopciones felinas”.
Situación en Jalisco
En Jalisco existen leyes y reglamentos de protección animal; sin embargo, poco se menciona al gato de manera específica. En el municipio de Guadalajara, el actual Reglamento Sanitario de Control y Protección a los Animales contempla la figura del gato tanto doméstico como asilvestrado para su atención preventiva mediante la esterilización. El reglamento además habla de la entrega responsable bajo mecanismos sugeridos en su momento por asociaciones e integrantes de plataformas que trabajan en favor de la adopción, y se crea la figura de la CIA (Centro de Integración Animal), un espacio físico en donde se albergan perros derivados de casos de maltrato y que son candidatos a la adopción.
Los gatos no tienen esta oportunidad, ya que el espacio físico que ocupa la CIA aún no observa los requerimientos para el albergue seguro de gatos. Sin embargo, las políticas públicas sobre protección animal tienden a mirar cada vez más a los gatos; como ejemplo están las campañas de esterilización que tanto en el formato público como en el ámbito privado, reciben tanto gatos como perros, y que en sus imágenes informativas incluyen cada vez más al gato, invitando a la población a llevar a sus felinos a atender.
Todavía hay mucho trabajo por hacer, los gatos son animales cariñosos y sociables con quienes reconocen como familia, incluyendo humanos. Requieren protección, atención y mucho cariño, así como hogares seguros. Si tienes dudas sobre la adopción de un gato acércate con agrupaciones protectoras, rescatistas o asociaciones quienes te proporcionarán la información necesaria como esta de Adopta Guadalajara: Cuidado y comprensión de gatos adoptados.
La asociación señala que los gatos no participan en su eventos de adopción por sus características propias, por lo que todas las adopciones de felinos se promocionan en línea; sin embargo a los interesados en adoptar perros los invitan a su evento de Enero que tendrá lugar el día 26 de 11 a 14 hrs en el parque Mariano Azuela, en Av. Vallarta a dos cuadras de La Minerva y del Centro Magno, sobre la vía recreativa.