Por Darwin Franco / @DarwinFranco
La convivencia de la familia Monreal en la colonia Rancho Nuevo en Guadalajara, Jalisco, fue interrumpida violentamente cuando diversos hombres armados descendieron de dos camionetas, una blanca y otra azul, señalando que “eran integrantes de Fiscalía”.
Aquel 20 de enero de 2019, alrededor de las 4:30 de la tarde, estos hombres desaparecieron de manera forzada a Miguel Ángel Maldonado Monreal (20 años); Ángel Fernando Rodríguez Monreal (18 años); Juan Carlos Monreal Candelas (40 años); Jesús Monreal Candelas (41 años); Luis Covarrubias Ramírez (51 años); y Jesús Naranjo Saucedo (28 años), a quienes se llevaron sin dar alguna explicación o sin siquiera mostrar una orden de aprehensión como de manera reiterada les exigía, la madre de Miguel Ángel; quien a su vez es hermana de Juan Carlos y Jesús; y tía de Ángel Fernando.
La acción de estos supuestos integrantes de la Fiscalía General de Jalisco, incluyó, también el hostigamiento de todas las mujeres presentes, a quienes encañonaron con armas largas hasta que éstas quedaron tendidas en el piso junto con los niños que estaban en casa.
Lo que recuerdan las mujeres que se quedaron en casa tras la desaparición forzada es el balazo que se escuchó cuando decidieron asomarse por la ventana para saber hacia dónde se fueron las camionetas con sus familiares; las integrantes de la familia Monreal llamaron inmediatamente a las autoridades para reportar la desaparición forzada; al arribar integrantes de la Fiscalía les dijeron, sin pruebas, que “Fiscalía no pudo haber sido” porque ellos no hacen eso que, quizá, la desaparición la realizó alguna banda dedicada a cometer esos crímenes.
La madre de Miguel Ángel, sin embargo, no ha dejado de insistir que lo que les pasó a sus familiares fue una desaparición forzada porque quienes se los llevaron se presentaron como integrantes de la Fiscalía, pero también porque hasta ahora en la Fiscalía Especializada en Desapariciones, no les han presentado ninguna prueba que confirme que no fueron integrantes de la Fiscalía ni tampoco les han dado información sobre la supuesta banda de desaparición que, al inicio, les dijeron se llevó a sus familiares.
“Han pasado dos meses y no hemos tenido ningún tipo de información de parte de la Fiscalía, han pasado dos meses y no tenemos avances… nunca nos han enseñado las cámaras de seguridad para saber a dónde se fueron… nosotros vimos que tomaron rumbo a Periférico, pero nunca nos han enseñado esto en Fiscalía”, señaló.
A estas irregularidades en su investigación también añade que: “hasta después de dos meses están viendo lo de sábana de llamadas… nosotras estamos molestas porque ni siquiera analizaron o investigaron el lugar desde donde estuvo aún timbrando el celular de mi hermano, el cual sonó hasta cinco días después de la desaparición, pero no hicieron nada, no fueron a investigar el lugar…”.
Lo único que sí han hecho en la Fiscalía General de Jalisco, es negar que se trató de una desaparición forzada, pero nunca con pruebas sólo con su dicho: “Nosotros tenemos bien grabado eso de que eran de Fiscalía, ya que eso dijeron cuando se los llevaron, pero eso no se ha investigado… ese día se llevaron a los puros hombres que estaban en casa… no sabemos por qué ni para qué, sólo sabemos que dijeron que eran de Fiscalía… se veían como de Fiscalía, estaban bien vestidos y traían camionetas como las que usan en Fiscalía, aunque estos autos no tenían ningún tipo de identificación ni los policías portaban ningún tipo de placa, pero se presentaron así: como integrantes de la Fiscalía”, precisó la familia.
Con el apoyo de Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (FUNDEJ), la familia Monreal ha logrado afrontar esta situación y ésta es la primera vez que públicamente hablan de la tragedia que les ocurrió el pasado 20 de enero: “Yo no quiero ninguna represalia en contra de nadie, yo sólo quiero saber dónde están… yo lo que quiero es volver a mi hijo, y a todos mis familiares”, concluyó la madre de Miguel Ángel quien no dejará de insistir a las autoridades su obligación de buscar a los suyos como lo que son: víctimas de una desaparición forzada.
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En el artículo “Marco Legal en Jalisco en materia de Desaparición de Personas” elaborado por Ana Elizabeth Cabral Pacheco y Anna Karolina Chimiak, abogadas del Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo, A.C. (Cepad), se precisa que:
La desaparición forzada de personas es una violación a los derechos humanos conformada por tres elementos concurrentes:
1 – la privación de la libertad
2 – intervención directa de los agentes estatales o la aquiescencia de estos;
3 – la negativa de reconocer la detención y de revelar la suerte o el paradero de la persona desaparecida;Por lo tanto, comete el delito de desaparición forzada de personas el servidor público o integrante de los cuerpos de seguridad pública que prive de la libertad a una o más personas, cualquiera que fuere su forma, seguido de la negativa de reconocer dicha privación de libertad o de informar sobre el paradero de la persona.
Esta figura delictiva está contemplada en el capítulo XI del Código Penal para el Estado de Jalisco en su artículo 154-A; sin embargo, en un lapso de seis años, en Jalisco sólo existen cuatro sentencias condenatorias por el delito de desaparición forzada, así informó –a través de una solicitud de transparencia- la Dirección General de Seguimientos a Procesos de la Fiscalía General de Jalisco.